Pedro Galván París

Ha comenzado la Champions y lo de cada año. Las goleadas vendrán en sacos, la vida seguirá siendo la misma y algún día entenderemos que la liguilla está hecha para que los grandes ganen.

El problema de Piqué es que cree que gritando y diciendo malas palabras conseguirá que la motivación de sus jugadores sea mayor.

Sin estrategia, sin recursos, con tristeza y con pena. Lo del año pasado, pero ahora con unos kilos de más y rubios.

Si decimos que el Barça perdió fuelle y llevaba tres partidos en una semana y el físico le pasó factura, pues haber puesto a los jóvenes de la segunda parte en la primera.

Corrían tiempos pretéritos por allá el 2009 cuando Pep visitaba el Bernabeu y tenía que hacer algo nuevo. Fue en ese momento en el que le dijo a Messi: “tú serás falso nueve”.

Lo que dice Ronald es que cuenta con Riqui y que le ve un futuro en el Barça, que es un pedazo de jugador y que se vaya a otro equipo a jugar este año

El agradecimiento a Messi es eterno. El estadio debería llevar su nombre, su número retirarlo y hacer mil estatuas.

Leo tuvo un día malo. Unas semanas. Se le giró la pinza. Se le fue la bola y estoy convencido que Messi tiene razón porque esta junta directiva lo ha machacado.

Dentro del campo y con el balón, Messi no fue de este mundo, sin embargo se obsesionó en recordarnos que fuera es, al fin y al cabo, un mortal.

Lo hace mal Koeman llamando a Suarez, lo hace mal Bartomeu por permitir que se trabaje con una agencia digital, lo hace mal Messi por enviar un burofax al club de su vida.

La noche más triste, vergonzosa, indigna e inolvidable de la historia del Barça se produjo ayer. Felicitar al Bayern que nos abrió los ojos.

Parece que en el último momento, el pájaro de varias mitologías y de color carmesí resurgió de sus propias cenizas y sobrevoló Alava metiendo cinco goles a un equipo caducado.

Lo del Barça es como ese zombie que lo están matando en alguna película de serie B, de los años ochenta que no moría nunca.

Cuando los árbitros quieren, dicen que cumplen el reglamento y cuando no, no. Qué casualidad que cuando perjudica al Barça sí que lo hacen y cuando ayudan al Madrid no lo hacen.

Independientemente de lo que haga el Real Madrid mañana, que le ganará al Espanyol como siempre, el Barça está en caída libre.

Ceo a Messi sin barba y me retrotrae a cuando éramos felices y no lo sabíamos. Después admiro a la última perla del Barça llamada Fati marcando un gol.

No nos engañemos, lo que hace del fútbol el mejor deporte del mundo. En la Bundesliga hemos podido sentir un atisbo de post apocalipse.

Por definición, es cierto que son 22 jugadores, un balón, árbitros y todo lo que ya sabemos. Fútbol era Kempes, Zico, Sócrates, Juanito, Cantona, Hristo y Van Basten

Pero también es fútbol: fallar y los rebotes. Y si Messi la hubiera metido, y si Arthur supiera chutar, y si tantas otras cosas, pero no pasó.