Joe Biden firma orden ejecutiva contra la desigualdad salarial
En el marco del Equal Pay - Día de la Igualdad de Salarios - el Presidente Joe Biden firma una orden ejecutiva para terminar con la desigualdad salarial.
En el marco del Día Nacional de la Igualdad de Salarios, también conocido como Equal Pay Day en inglés, el Presidente de la Unión Americana, Joe Biden, firmó una orden ejecutiva para terminar con la desigualdad salarial.
Los decretos buscan erradicar la disparidad salarial entre hombres y mujeres para empleados federales y contratistas. Con esto, los contratistas federales tienen estrictamente prohibido monitorear información sobre un solicitante de empleo “referido a su historia salarial”.
También se busca que estos mismos contratistas refuercen sus obligaciones para “auditar nóminas de pago como una forma de proteger a los empleados contra las disparidades salariales basadas en género, raza o etnicidad”.
“Mi Administración está comprometida a cerrar la brecha salarial de género asegurando que todos los estadounidenses tengan una oportunidad justa e igualitaria de salir adelante, para que pronto podamos hacer del Día de la Igualdad Salarial una reliquia del pasado”, expresó el Presidente.
La desigualdad salarial entre hombres y mujeres
De acuerdo a un análisis realizado por el Pew Research Center de Washington D. C., en 2020, las mujeres ganaron el 84% de lo que ganaron los hombres, lo que significa que el género femenino se vió forzado a trabajar 42 días más a comparación de los hombres para poder igualar sus salarios.
Los análisis fueron realizados antes de la pandemia. Dicho esto, Jasmine Tucker, directora de investigaciones de National Women’s Law Center, señala que el coronavirus alteró la participación de las mujeres en la fuerza laboral, afirmando que, aunque la desigualdad salarial se encuentra en su punto más bajo, “lo que vemos es un achicamiento artificial”.
Aunado al Equal Pay Day, los decretos de Biden llegan en pleno mes de la mujer. Recordemos que a finales de febrero, la USWNT logró llegar a un acuerdo con la US Soccer para que las mujeres recibieran los mismos salarios que los hombres en el fútbol estadounidense. El logro se dio después de más de tres años de lucha.
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