Wilma Rudolph, pionera en el atletismo estadounidense
WIlma Rudolph es la primera atleta estadounidense en ganar tres preseas doradas en una justa olímpica en las pruebas de 100m, 200m y el relevo de 4x100m.
Wilma Glodean Rudolph es una de las atletas estadounidenses más destacadas y en el marco del Día Internacional de la Mujer la recordaremos.
Rudolph nació de manera prematura en Saint Bethlehem, Tennessee el 23 de junio de 1940 y poco tiempo después su familia se mudó a Clarksville. Fue la sexta hija de su madre y la vigésima de su padre.
Durante su infancia sufrió escarlatina, neumonía y polio. Esta última enfermedad provocó que perdiera fuerza en su pierna izquierda. Debido a la nula atención médica para los afroamericanos en Clarksville, sus padres la llevaban al Mehary Medical College en Nashville para su tratamiento médico.
Gracias al tratamiento médico y a los masajes brindados por su familia, Rudolph pudo caminar sin apoyo alguno a los 12 años. Durante sus años de bachillerato destacó en el equipo de baloncesto y el de atletismo de la Burt High School en Clarksville.
A los 16 años tuvo su primera participación en los Juegos Olímpicos de Melbourne y fue parte del equipo estadounidense que obtuvo la medalla de bronce en el relevo de 4x100. Sus compañeras fueron Mae Faggs, Margaret Matthews e Isabelle Daniels. Además, corrió la prueba de los 200 metros, pero no logró clasificarse a la ronda final luego registrar un tiempo de 24.6 segundos en su heat clasificatorio.
En 1958, Rudolph se convirtió en madre por primera vez y poco tiempo después se unió a la Universidad de Tennessee State. Su progreso como atleta le permitió ganar la medalla de plata de los Juegos Panamericanos de 1959 en el evento de 100 metros y el oro en el relevo de 4x100.
Tres oros
En los Juegos Olímpicos de 1960, celebrados en Roma, Rudolph compitió e hizo historia al convertirse en la primera atleta estadounidense en ganar tres medallas de oro en una justa olímpica al ganar las pruebas de 100 metros, 200 metros y el relevo de 4x100 metros.
Rudolph había establecido el tiempo récord en la competencia de 100 metros al ganar el oro con un tiempo de 11.0 segundos, pero como el viento era más fuerte de lo permitido, no se le acreditó la marca mundial.
En la prueba de 200 metros, Rudolph estableció el récord olímpico con un tiempo de 23.30 segundos en la ronda clasificatoria y obtuvo la presea dorada con 24.13.
Bajo un calor de 43 grados centígrados y junto a Barbara Jones, Lucinda Williams y Martha Hudson, Rudolph completó su proeza al ganar su tercera medalla dorada en Roma al ganar el relevo de 4x100 metros.
Al regresar a Clarksville, fue recibida con un desfile que, gracias a su presión para romper con las medidas segregacionistas, se convirtió en el primer evento sin separaciones raciales en la ciudad.
Tras dejar la actividad deportiva en 1962, Rudolph obtuvo un título universitario en educación básica y se convirtió en maestra de la primaria Cobb, a la que ella asistió.
En 1984 estableció la Fundación Wilma Rudolph para apoyar programas de atletismo. Rudolph falleció el 12 de noviembre de 1994 debido a cáncer de cerebral y de garganta.