Ken Griffey Jr., clave en la celebración de Jackie Robinson Day en MLB
En 1956, de acuerdo con datos de la MLB recopilados por The Undefeated, el 6.7 por ciento de los peloteros eran afroamericanos. Para 2017, la cifra aumentó apenas a 7.7 por ciento.
Deporte de tradiciones, el baseball tomó un rumbo diferente el 15 de abril de 1947 cuando Brooklyn Dodgers pusieron fin a una liga hegemónica de peloteros blancos para dar paso a Jackie Robinson, infielder de gran velocidad y coraje para competir que ayudó al equipo a ganar el título de Serie Mundial de 1955.
Con él y muchos otros peloteros que le siguieron, las Negro Leagues pasaron de ser la liga alternativa para los marginados a un recuerdo del permeante racismo de la época. Entronizado en el Salón de la Fama por el significado de su llegada a las Mayores y la numerología correspondiente, Robinson es al día de hoy una de las vivas leyendas del deporte que año con año se conmemoran por su aportes.
También como un gesto por mantenerlo presente en 2007, el patrullero Ken Griffey Jr. pidió utilizar el dorsal 42 en su espalda para honrar el legado que dejó Robinson sobre los diamantes. Haciendo caso a su propuesta, el comisionado de las Mayores en turno, Bud Selig, concedió ante la decisión de The Kid y le permitió a cada pelotero de la Gran Carpa que quisiera llevar el número del histórico jugador.
Para 2009, el 15 de abril pasó a ser Jackie Robinson Day.
Desde entonces, año con año, peloteros de más de una veintena de nacionalidades, de un diverso abanico de epidermis, portan el uniforme de su novena con el número 42 en la parte trasera de su franela.
Robinson fue líder de bateo a tres años de llegar a la liga en 1949 (.342) y terminó su carrera por encima de la barrera de los .300 de promedio (.311) y con un MVP entre sus manos.
El impacto que tuvo su presencia en las Grandes Ligas se midió tan pronto como llegó y recibió desde insultos racistas de la tribuna y los clubes opuestos hasta amenazas de muerte.
Hank Aaron, de Atlanta Braves, alcanzó el 8 de abril de 1974 la marca de Babe Ruth con el cuadrangular 715 de su carrera. En su camino a conseguir la cifra, cerca de 30 años después de la firma de Robinson a la novena del Ebbets Field, oficiales del FBI tuvieron que escoltarlo debido a amenazas de muerte de origen racista.
En 1956, de acuerdo con datos de la MLB recopilados por The Undefeated, el 6.7 por ciento de los peloteros eran afroamericanos. Para 2017, la cifra aumentó apenas a 7.7 por ciento.
Un reporte del columnista Bob Nightengale señaló que en 2020 el número escaló al 7.8%.
Mural de Robinson
Una de las historias más infames contra la comunidad afrodescendiente en Estados Unidos tomó lugar en Tulsa, Oklahoma, conocida como la Masacre Racial de Tulsa. En ella, en lo que se dominaba a inicios del Siglo XX como “Wall Street Negro”, una multitud de blancos destruyeron el lugar destruyendo cientos de negocios de afroestadounidenses y matando a alrededor de 300 residentes.
Hoy en día, en la casa detrás del a casa de Tulsa Drillers, filial de AA de Los Angeles Dodgers, se erige un mural que conmemora al pelotero con motivo del acontecimiento previamente señalado.