Matt Chapman: Oakland Athletics tienen ventaja de jugar sin fanáticos
El jugador señaló que si hubieran aplicado todas las pruebas de la covid-19 antes del 1 de julio en Oakland la plantilla entera habría entrenado en tiempo.
El Oakland Coliseum está lleno de historia. Cuatro títulos de Serie Mundial se celebraron en el lugar (1972, 1973, 1974, 1989) y los Raiders capturaron el Vince Lombardi (XI, XV) en dos ocasiones mientras tuvieron como casa el recinto de Alameda County. Sin embargo no ocurre lo mismo cuando de aficionados se trata.
El parque de pelota de altos muros de concreto que favorece a los bateadores, en 81 partidos en casa durante la temporada 2019 de los Athletics sólo llegaron 1,662,211 aficionados; es decir 20,521 por partido en promedio, a pesar de ser el octavo más grande de la MLB. Desplegar la zona cerrada del coloso de la bahía es sólo un acto de apremio en la postemporada, cuando las toallas amarillas iluminan las bancas de cemento.
Es por ello que la organización con la vigésima cuarta peor afición en las Mayores, contabilizan datos de ESPN, no sentirá la diferencia de jugar en una campaña sin aficionados en medio de una pandemia, considera el antesalista Matt Chapman: “Creo que nos dará ventaja, muchos partidos están muy apaciguados en general. Estamos acostumbrados a no tener muchos aficionados en los juegos”, dijo en una videocharla con reporteros, de acuerdo con Susan Slusser, de San Francisco Chronicle.
"Creo que otros equipos vendrán y no verán aficionados en un inmenso estadio vacío que puede ser un poco frío de noche. Simplemente nos da ventaja. Estamos acostumbrados. Sin importar si son chicas o grandes, estamos acostumbrados a jugar en ambos”, reiteró el ganador de dos Guantes de Platino.
A's inician a mal paso
En días anteriores, la MLB mencionó que no todas las pruebas de la covid-19 aplicadas en la primera fase previa al entrenamiento de verano habían llegado a su destino. Esto causó el retraso de las prácticas conjuntas para algunas organizaciones. Los Athletics eran una de ellas, pues no aplicaron todas las pruebas previo al 1 de julio.
“Sé que es un error honesto, pero si hubiésemos sido un poco más productivos y hubiéramos traído a los muchachos antes, como lo hicieron otras organizaciones, y hubiésemos hecho las pruebas antes del 1 de julio, entonces nunca habría existido un retraso en las pruebas porque no lo habríamos desaprovechado. No es culpa de nadie, per se, pero cuando se espera hasta el último momento para hacer las cosas, generalmente terminan por sobrepasarte”, criticó el pelotero.
El antesalista All Star estuvo en el Oakland Coliseum con Matt Olson, Marcus Semien y Khris Davis desde el incio del campamento de verano porque el equipo ya tenía sus resultados del test.