La última visita de Estados Unidos a Trinidad y Tobago terminó en tragedia
La última vez que Estados Unidos visitó Puerto España, Trinidad y Tobago se llevó la victoria y de paso eliminó a los norteamericanos del Mundial. El lunes puede ser diferente.
Es difícil olvidar. La última vez que Estados Unidos visitó la ciudad de Puerto España para medirse a Trinidad y Tobago, los norteamericanos fueron eliminados de la Copa del Mundo de Rusia 2018. Los caribeños se impusieron 2-1 y de paso le dieron un duro golpe de realidad a los entonces dirigidos por Bruce Arena.
Los caribeños le rompieron una racha de siete mundiales consecutivos a los norteamericanos, quienes antes de Rusia no se perdían la justa más importante desde que quedaron fuera en México 1986.
“Es el peor día de mi carrera. Estoy completamente destrozado, no sé como expresarlo con palabras. Quiero pedir disculpas a todos los aficionados que creyeron en nosotros, los hemos defraudado” lamentó Omar González, tras ese partido.
Los trinitarios también llegaban a ese juego con cuentas pendientes. Rumbo a la Copa del Mundo de Italia 1990, Estados Unidos rompió una racha de nueve Copas del Mundo consecutivas sin poder calificar, y lo consiguió a costa de los del Caribe. El 19 de noviembre de 1989, Paul Caliguri le daba la victoria a los del país de las Barras y las Estrellas, y de paso dejaba fuera a Trinidad y Tobago.
“En 1989, el papá de Alvin Jones, Kelvin Jones, un buen lateral izquierdo. Él estaba en el banquillo en aquella derrota que sufrimos en Puerto España. Ahora, él (Alvin) tiene la oportunidad de cobrar revancha alguños años más tarde” dijo Lasana Liburd, reconocido periodista del país caribeño después de la victoria que obtuvieron ante Estados Unidos en el 2017.
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La Copa América en juego
Cinco años más tarde, la historia es completamente diferente. Más allá de que la película parecía que volvería a repetirse, Estados Unidos se las ingenió para rescatar una victoria por tres goles en casa, y de esa manera encarrilar una eliminatoria que parece ser solamente un trámite cuando jueguen en Trinidad y Tobago.
Solamente dos jugadores de la generación actual, estuvieron presentes en aquel duro momento que vivió Estados Unidos. Uno de ellos es Christian Pulisic, quien desafortunadamente por una lesión quedó fuera de la convocatoria, y el otro es Tim Ream, quien vio el partido desde el banquillo.
“Espero que siempre esté presente en nuestra mente”, dijo Berhalter durante la conferencia de prensa antes del primer duelo. “Así como podemos aceptar las cosas buenas, también tenemos que aceptar las cosas malas. Y fue un gran momento de aprendizaje para nosotros colectivamente, los entrenadores involucrados, los jugadores involucrados. En mi opinión, no se trata de ignorarlo, sino de aceptarlo e inclinarse hacia ello”.
Hoy la presión no está del lado de Estados Unidos. La ventaja de tres goles les da un colchón para cerrar el trámite el próximo lunes, y con la oportunidad de festejar su boleto hacia la Copa América.
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