Anoten a Dak Prescott y a los Cowboys como contendientes
Los Dallas Cowboys tienen los ingredientes que tienen los contendientes: un buen quarterback, un buen ataque terrestre y una defensa oportunista.
Foxborough solía ser una aduana insufrible. No más.
Los Patriots están 0-4 en el Gillette Stadium esta campaña. El domingo, New England jugó probablemente su mejor partido de la temporada, pero ni así fue capaz de vencer a los Dallas Cowboys.
Los Patriots de Bill Belichick están -aunque sus fans odian leer esto- en reconstrucción. Los Cowboys están del otro lado del espectro. De la mano de Dak Prescott, de una poderosa ofensiva y una defensa oportunista, Dallas es un legítimo contendiente en la NFC.
Fue el primer triunfo de Dallas sobre New England desde 1996. Los Cowboys estaban 0-5 ante el equipo de Belichick.
No más. Prescott pasó para 445 yardas y con sus tres touchdowns llegó a 16 en la campaña, con los que ocupa el tercer lugar de la NFL, detrás de Patrick Mahomes (18) y Tom Brady (17).
No fue fácil para Dallas en Foxborough, en un juego que tuvo que resolverse en tiempo extra, no sin antes sobrevivir a una serie de polémicas llamadas de los oficiales y un par de intercambios de balón dentro de la zona roja, incluido un fumble de Prescott en un quarterback sneak en el que parecía haber cruzado las diagonales.
Pero dicen que los equipos buenos siempre encuentran la manera de ganar, incluso cuando no juegan bien. Y es justo eso lo que hicieron los Cowboys la noche del domingo: encontraron la manera de ganar un juego que dominaron desde el kickoff.
“Cuando estás en una buena racha, empiezas a pensar en el Super Bowl”, dijo el wide receiver Amari Cooper la semana pasada. “Empiezas a quererlo más y más cuanto más te acercas”.
Dallas ha ganado cinco en fila después de perder un thriller en la Semana 1 en Tampa y, después de muchos años, el equipo de Jerry Jones finalmente se ve balanceado.
La ofensiva es la mejor de la liga en varias categorías, incluida yardas por juego (460.8), yardas por jugada (6.58) y puntos por partido (34.2); es segunda en yardas terrestres por juego (164.3) y primeros y 10 (27.3); cuarta en efectividad en tercer down (46.67%) y quinta en yardas aéreas por partido (296.5).
La defensiva, irreconocible
Un año después de terminar con la peor defensa de la liga, el coordinador defensivo Dan Quinn le ha cambiado la cara dramáticamente a esa unidad.
El cambio más significativo, sin embargo, está en la defensa contra la carrera: en 2020 Dallas permitió 158.8 yardas por juego y esta campaña ese número se ha reducido a 86.2.
Los Cowboys han encontrado la manera de presionar al quarterback, en gran medida gracias a la presencia del novato Micah Parsons (2.5 sacks y 10 golpes a los pasadores) y a la sólida temporada de Randy Gregory (4 capturas, 8 hits).
Pero la gran revelación es el cornerback Trevon Diggs, quien empieza a ser comparado con Deion Sanders.
No, Diggs no es el nuevo Deion, pero por el momento sí es el mejor corner de la NFL. Con la intercepción que regresó a las diagonales en el cuarto periodo en Foxborough, Diggs se convirtió en el primer jugador en la era del Super Bowl con siete o más intercepciones y dos o más pick 6 en los seis primeros juegos de una campaña.
Pocos quarterbacks van a retar a Diggs en lo que resta de la temporada y quienes lo hagan jugarán con fuego y podrían pagar el precio.
Dallas es líder de la NFL con 11 intercepciones y es segundo con 14 turnovers, solo detrás de los 16 de Buffalo.
No todo es perfecto, por supuesto, y el coach Mike McCarthy debe corregir algunas cosas. Dallas ha cometido 47 castigos, lo segundo más alto en la liga, incluidos 12 en el triunfo sobre Patriots que costaron 115 yardas.
Contendientes, sin duda
Los Cowboys tienen los ingredientes que tienen los contendientes: un buen quarterback, un buen ataque terrestre y una defensa oportunista.
Los contendientes en la NFC se cuentan con los dedos de una mano: Arizona (6-0), Tampa Bay (5-1), Dallas (5-1), Green Bay (5-1) y Los Angeles Rams (5-1).
Los Cowboys están en su semana de descanso y después de juegos ante Minnesota, Denver y Atlanta, enfrentarán en semanas consecutivas a los Kansas City Chiefs y Las Vegas Raiders, en Thanksgiving, juegos que nos dirán más acerca de la franquicia de la “Estrella Solitaria”.
Arizona, por cierto, está en el camino: el 2 de enero, en un juego que desde ya les digo que será movido a Sunday Night Football.
Sí, los Cowboys son contendientes y su afición tiene derecho a soñar con un Super Bowl, instancia a la que Dallas no regresa desde la campaña 1995.
“Sabemos que somos de verdad y creemos que somos de verdad”, dijo Prescott tras el triunfo sobre los Patriots. “No creo que estemos necesariamente aquí tratando de enviar un mensaje a nadie, sino a nosotros mismos”.