Estados Unidos gusta de no ser favorito en Copa Oro

En las CONCACAF Nations League, Estados Unidos le comprobó a la confederación y al mundo que su generación dorada tiene las armas necesarias para subsistir y tener éxito, pero ahora es momento de que también las reservas le comprueben que pueden estar a la altura de la región para enfrentar la Copa Oro y servir de buena manera para las Eliminatorias Mundialistas.

Por ello, en este nuevo torneo quieren comprobar que las metas del proyecto son claras y siempre yendo hacia el máximo nivel, según lo que ha establecido Gregg Berhalter: “Ese es el objetivo desde el primer día. Estamos enfocados en competir para ganar el trofeo. El 1 de agosto queremos estar jugando en la final y esa misma noche queremos ganar”.

“Sabemos que es una tarea complicada, sabemos que hay buenos equipos en este certamen y no queremos faltarle al respeto a ninguno de estos”, comentó el entrenador en conferencia de prensa. “Para nosotros es ir partido a partido, dando todo lo que tenemos en cada juego y el siguiente. Creo que tenemos un grupo talentoso, joven claro, pero de gran talento”.

En ese primer paso, su primer reto será ante el conjunto de Haití, el cual se clasificó a través de las rondas preliminares. Los dirigidos por Marc Collat le hicieron difícil el pase eliminatorio a Canadá y Berhalter sabe de eso, por lo que el encuentro en el Children’s Mercy Park ya ha sido estudiado y tomado con seriedad para arrancar el camino al título con tres puntos.

El grupo de jugadores quieren vencer a todos

Desde el banquillo se toma sin tantas emociones la pelea por el título, sin embargo, los jugadores como Paul Arriola sí apelan mucho a ellas para vengarse del rival más odiado: “Para mí es mejor que la gente diga que no somos favoritos. Para nosotros creo que no hay tanta presión, pero puede decir que todos los presentes creemos que tenemos que ganar. Por eso estamos aquí, para ganar la Copa Oro, para vengarnos de México”.