Con tormenta en el horizonte: J.D. Martínez pide paz contra Astros
El toletero de los Red Sox es el primer pelotero que pide que cesen los ataques contra Houston por su escándalo de robo de señales.
Desde que el comisionado Rob Manfred dio a conocer el mes pasado las tenues sanciones contra los Astros por su intrincado sistema de robo de señales que derivó en un título de Serie Mundial, uno a uno, peloteros alrededor de la liga han expresado su frustración contra la MLB en general y contra Houston en particular, dándoles la espalda.
Anoten a J.D. Martínez entre los defensores de los Astros.
El toletero de los Red Sox habló el lunes para levantar la bandera blanca y hacer un llamado a sanar la herida, dándole vuelta a la página de uno de los episodios más oscuros en la historia del “pasatiempo americano”.
“Entiendo las frustraciones de los peloteros y esas cosas, pero en mi opinión, creo que está llegando demasiado lejos”, dijo Martínez.
Sí, puede que J.D. Martínez sea magnánimo al pedir un alto a los ataques, hasta el momento exclusivamente verbales, en contra de los Astros.
Lo más probable, sin embargo, es que simplemente esté curándose en salud. A fin de cuentas, Houston es el villano de hoy, pero Boston será sin duda el villano de mañana o cuando quiera que sea que Manfred se decida a dar a conocer la sanción en contra de los Red Sox por prácticas, y resultados, similares a las de los Astros.
“Debemos dejar esto atrás en algún momento. No podemos seguir hablando de eso. Sé que es frustrante en este momento. La gente quiere hablar de esto y aquello, pero es 2020”, continuó. “Creo que los equipos están al tanto de todo lo que sucedió. A partir de ahora, va a ser un mensaje distinto en la caseta y un ambiente distinto, como con los esteroides. Los castigos fueron tan duros que las personas dejaron de intentarlo. Creo que se llegará a ese punto”.
Claro que eventualmente se llegará a ese punto. Cuando los castigos por ese tipo de escándalos reflejen fielmente el tamaño de la falta. Manfred falló garrafalmente en su primer intento, imponiéndole a los Astros una multa de 5 millones de dólares, suspendiendo al manager AJ Hinch y al gerente Jeff Luhnow -ambos despedidos- durante un año, y despojando al equipo de sus dos primeras selecciones en los próximos dos drafts.
¿Fue suficiente? No, de acuerdo a varios de los rivales de los Astros, que han dejado implícito un aguacero de pelotazos a lo largo de todo el orden al bate de Houston durante la temporada regular, y hay quienes incluso han pedido que se les despoje del campeonato y cosas peores. Lo que más indigna, sin embargo, no ha sido la trampa en sí, sino la falta de sanciones a los peloteros por una treta que, de acuerdo a las investigaciones, fue ideada y promovida por ellos mismos.
Martínez tiene muy claro porque los jugadores resultaron libres de cualquier castigo. Sin la inmunidad a los peloteros, la investigación habría arrojado muy pocos resultados.
“Así son las cosas. Nunca hubo datos duros evidentes. De no ser porque los jugadores hablaron y recibieron inmunidad, no creo que alguien hubiera dicho algo”, dijo Martínez.
Y tiene razón. Sin testimonios de los involucrados no hay investigación. Así de simple.
La mala noticia para Martínez y los Red Sox es que tantas quejas de los peloteros sin duda han llegado a los oídos de Manfred, quien aún tiene una segunda oportunidad de hacer las cosas bien cuando dé a conocer la sanción en contra de Boston por el uso de tecnología para el robo de señales durante la temporada de 2018, que concluyó con la obtención del campeonato.
Tal vez ahora el comisionado decida castigar a peloteros, repartir suspensiones más jugosas o hacer lo que no hizo con Houston. Despojarlos del título. Ahora entendemos porque Martínez pide paz.