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Andrew Heaney habla del robo de señas de Astros en 2017

El serpentinero de los Angels suma a Cody Bellinger, Masahiro Tanaka, Yu Darvish y otros peloteros en declarar sus molestias por las acciones de Astros.

Estados Unidos
El serpentinero de los Angels suma a Cody Bellinger, Masahiro Tanaka, Yu Darvish y otros peloteros en declarar sus molestias por las acciones de Astros.
Mike EhrmannGetty Images

El robo de señas de Houston Astros no solo significó el despido de A.J. Hinch y de Jeff Lunhow de dicha novena, y consecuentemente de Alex Cora, en Boston, y de Carlos Beltrán, en Queens. Pero también una ola de reacciones de peloteros y expeloteros, molestos por hacer trampa en el año en el que consiguieron el título, 2017, así como manchar el nombre del baseball con otro episodio antideportivo en su historia.

La más reciente declaración la dio Andrew Heaney, lanzador de Los Angeles Angels. "Alguien en ese vestidor tuvo que haber dicho: 'Ésto está del carajo, no deberíamos hacer ésto'", dijo el serpentinero a Jeff Fletcher, de Orange County Register.

"El hecho de que nadie se haya posicionado y que nadie haya dicho: 'Estamos haciendo trampa a otros jugadores', apesta. Es un sentimiento jodido para todos. Espero que se sientan como una mierda", sostuvo el ligamayorista.

¿Pesquisa concluyente?

Aunque la liga ya concluyó con su respectiva investigación al club de Texas y emitió desde la oficina del comisionado Rob Manfred su resolución sobre el escándalo, los reportes periodísticos no han dejado de salir y de revelar sobre cómo fue la evolución de la creación del esquema ilegal, así como los actores de principal responsabilidad.

Desde que Manfred comunicó las sanciones y finalizó la investigación, solo tres jugadores de los Astros han salido a disculparse públicamente por los hechos. Ninguno de ellos forma parte de la actual plantilla del equipo. Se trata de Dallas Keuchel, Charlie Morton y Marwin González.

Asimismo, el reporte del comisionado omitió nombres de jugadores involucrados, exonerándoles de forma automática de cualquier responsabilidad sobre el robo de señas.

"Fue terrible. Entiendo que ordenarán su desastre y que tendrán algo que decir, y se esconderán detrás del reporte del comisionado o lo que sea, pero no creo que sea suficiente", confesó Heaney.