Troy Polamalu, un ídolo de los Steelers que no conoció el ego
El strong safety de Pittsburgh se distinguía no sólo por su melena rizada, sino por las jugadas acrobáticas y espectaculares.
Cuando Troy Polamalu estaba en el campo, era imposible perderlo de vista. El strong safety de los Steelers con esa larga y rizada melena (a veces tapaba el 43 en el jersey) estaba por doquier y hacía jugadas espectaculares.
Polamalu (19 de abril de 1981, Santa Ana, California) hacía cosas que pocos podían replicar. Este dinámico jugador de Pittsburgh le cambió la cara a la posición de safety fuerte en la NFL.
Polamalu, una selección de primera ronda en el Draft 2003, proveniente de Southern California, siempre estaba cerca del balón: tacleaba corredores, capturaba quarterbacks, desviaba pases o, mejor aún, los interceptaba.
Es el séptimo en la lista histórica de los Steelers con 32 intercepciones (dos touchdowns) y muchas de ellas fueron mediante acrobacias: a una mano, después de un rebote o en pleno vuelo. ¡A veces todo eso en la misma secuencia! Como Superman.
Normalmente era el mejor atleta en el campo, pero su personalidad no era la típica de una superestrella de la NFL.
Polamalu más bien fue un jugador reservado, humilde, que pocas veces pedía o exigía algo. Él sólo quería ser feliz y jugar football.
“Hay muchas tentaciones en el campo de football: arrogancia, ego, orgullo… Yo trato de protegerme de todo eso”, dijo Polamalu.
En 12 años de carrera en la NFL, todos con los Steelers, sumó 778 tacleadas y 12 capturas de quarterback. Forzó 14 fumbles, recuperó otros siete y dos se los llevó hasta las diagonales.
Sus instintos no tienen comparación y su nivel de anticipación también era único.
Polamalu podía acercarse a la línea de scrimmage en el último segundo, y en cuanto el centro intercambiaba el balón con el quarterback, de un salto superaba a los linieros ofensivos y en un instante ya estaba encima del pasador.
Fue justo lo que hizo en el primer cuarto del Juego por el Campeonato de la AFC, en enero de 2009. En cuarto down y una yarda por avanzar, Joe Flacco, quarterback de los Baltimore Ravens, trataría de ganar esa yarda en un “sneak”, pero en cuanto recibió el balón Polamalu lo tenía abrazado para evitar el primero y 10.
A poco menos de cinco minutos del final del juego, Polamalu interceptó un pase de Flacco y se lo llevó 40 yardas hasta el touchdown para darle a Pittsburgh el boleto al Super Bowl XLIII.
Ganó dos anillos de campeón con los Steelers. En 2010 fue Defensivo del Año. Fue seleccionado en el equipo de la década de los 2000’s. Cuatro veces fue All-Pro y en ocho ocasiones invitado al Pro Bowl.
“No creo amar al football. Amo la vida”, decía. “Y el football es una parte de la vida, y es de esa manera que amo al football. El football no es lo que somos, es lo que hacemos”.
Y lo que él hacía era simplemente increíble.
Troy Polamalu se retiró al final de la temporada 2014. En mayo, él y su esposa Theodora anunciaron que se unieron a la campaña #YMCKiss, que se esfuerza por terminar con los problemas de salud mental de los niños.