¡Impresionante! Ballena se traga a dos mujeres y segundos después las escupe
En los últimos días se ha hecho viral un vídeo que muestra a una ballena tragándose a dos mujeres que hacían kayak para escupirlas segundos después.
En los últimos días se ha hecho viral un vídeo que muestra a una ballena jorobada tragándose a dos mujeres mientras hacían kayak. Segundos después, el animal las escupe, devolviéndolas a la superficie, pues su garganta no tiene la capacidad de ingerir a un ser humano.
De acuerdo a Nicola Hodgins de Whale and Dolphin Conservation, la boca de una ballena jorobada puede llegar a medir unos tres metros, pero la garganta sólo tiene el tamaño aproximado de un puño humano y puede extenderse hasta unos 38 centímetros de diámetro para alimentos más grandes, lo que explica el por qué el animal devolvió a las dos mujeres a la superficie segundos después de haberlas capturado en su boca.
Vídeo: ¡Impresionante! Ballena se traga a dos mujeres y segundos después las escupe
Aunque el vídeo se hizo viral recientemente, lo cierto es que se trata de un caso de hace dos años.
Los hechos sucedieron en la bahía de San Luis Obispo, en California, cuando dos amigas, Julie McSorley y Liz Cottriel, navegaban en kayak. Una vez expulsadas por la ballena, las mujeres fueron atendidas de manera urgente por las autoridades de la zona. Ninguna presentó heridas de gravedad.
A continuación, las impactantes imágenes.
No es la primera vez que seres humanos terminan en boca de ballenas
Por más impresionante y extraño que parezca este suceso, lo cierto es que no es la primera vez que ocurre algo así.
En 2019, en el puerto de Port Elizabeth, en Sudáfrica, un operador quedó atrapado en la boca de una ballena jorobada, que también terminó por escupirlo segundos después, al igual que un buceador en la costa de Cape Cod, en Massachusetts, Estados Unidos, en 2021.
De acuerdo con National Geographic, de las 90 especies de ballenas conocidas, “los cachalotes son la única cuyas gargantas son lo bastante grandes para, técnicamente, tragarse a un humano”, aunque las probabilidades de que esto ocurra son casi nulas, ya que los encuentros entre humanos y cachalotes “son rarísimos”.