¡Por fin! Llegó el pick del Super Bowl LVI entre Los Angeles Rams y Cincinnati Bengals
La temporada más larga en la historia de la NFL llega a su fin este domingo con el Super Bowl LVI entre los Rams y los Bengals, un enfrentamiento que nadie vio venir
Con los Rams instalados en sus cinco elementos y los Bengals desafiando todas las probabilidades para llegar al final del camino, el Super Bowl LVI está sobre nosotros.
Si al principio de la campaña alguien se atrevió a vaticinar que Cincinnati estaría haciendo su tercera aparición en el juego grande, tiene el respeto de toda la liga y es millonario.
Con toda sinceridad puedo decir que nadie vio venir un Super Bowl con los Bengals viajando a Los Angeles para jugar de "local" contra los Rams.
La temporada más larga de la historia como fue bautizada por sus 23 semanas de duración, ha sido un largo viaje sobre una montaña rusa con una gran cantidad de partidos decididos en la última jugada del encuentro, tal como pasó en el Juego de Campeonato de la AFC cuando los Bengals rompieron el orden de las apuestas al derrotar en Arrowhead a los Chiefs.
Después de terminar la campaña pasada con 11 derrotas y cuatro victorias para ocupar el último puesto del Norte de la AFC, los Bengals dieron un salto de calidad al adueñarse de la división por primera ocasión desde 2015.
Los Bengals demostraron ser un equipo resiliente. Una tribu de jugadores y entrenadores comprometidos con un proceso que sigue caminando hacia el principal objetivo que tiene cualquier organización en la NFL: Ser campeón del Super Bowl.
Cincinnati lo hizo apegándose a la icónica frase de Rocky Balboa “no es lo fuerte que golpeas, sino lo fuerte que eres cuando te golpean”.
Por primera ocasión se enfrentan los Rams contra los Bengals en el escenario más grande que hay en el football.
La franquicia de Los Angeles no quiere ser la primera que pierda un Super Bowl en casa. No conseguir la victoria sería equivalente a una temporada perdedora porque en esta metrópoli del sur de California como dijera Vince Lombardi: Ganar no es lo más importante, es lo único.
En las apuestas, los Rams son potenciales campeones con cuatro puntos de ventaja, no culpo a los creadores de líneas. El equipo de McVay tiene todas las piezas en su lugar para que el engranaje de la maquinaria produzca un trofeo Vince Lombardi para la organización. El problema es que se enfrentan a los Bengals, un agente del caos. Un conjunto de jugadores que operan bajo la dinámica de lo inesperado. Los Bengals (25,8) son el equipo de Super Bowl de menor edad promedio desde 1980.
Durante 49 años, ningún quarterback reclutado con la primera selección del Draft había alcanzado el Super Bowl hasta que Peyton Manning (Draft 1998) se midió a Cam Newton (Draft 2011), en el Super Bowl 50. Ahora lo harán Joe Burrow (Draft 2000) y Matthew Stafford (Draft 2009).
Stafford, de 33 años, estableció récords personales en porcentaje de pases completos (67.2) y pases de touchdown (41) este año. Solo Tom Brady (43) lanzó más pases de anotación.
Burrow guió a LSU a un campeonato nacional de playoffs de fútbol americano universitario en 2019. Con una victoria el domingo, se uniría a Joe Montana y Joe Namath como los únicos quarterback en ganar campeonatos en ambas divisiones del football, pero Burrow con el plus de que lo hará con un trofeo Heisman en su vitrina para completar la triple corona. El club de los Joe. Burrow será el primer pasador reclutado con la selección 1 global del Draft en iniciar un Super Bowl en su segunda campaña profesional.
Este año, Burrow estableció el récord de franquicia de una temporada de los Bengals en yardas aéreas (4616), touchdowns (34) y índice de pasador (108,3).
Los dos head coach que estarán el domingo en la banda, Zac Taylor de Cincinnati (38 años) y Sean McVay de los Rams (36 años), tendrán 74 años y 299 días combinados el domingo, la a más joven para los entrenadores en jefe rivales en la historia del Super Bowl. Los Rams, están haciendo su quinta aparición en el Super Bowl, y la segunda en los últimos cuatro años. Los Ángeles apareció por última vez en el gran juego en 2018, cuando los Patriots los derrotaron 13-3.
Ha sido una de las mejores postemporadas en los últimos 20 años. El final será dramático pero genial.