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Las 5 cosas que aprendimos de la Semana 4 de la NFL

Con un mes de temporada extinto, la liga nos sigue dando sorpresas, actuaciones individuales destacadas y el final de la telenovela de Brady y su regreso a Foxborough.

Estados Unidos
Con un mes de temporada consumido, la liga nos sigue dando sorpresas, actuaciones individuales destacadas y el final del telenovela de Brady y su regreso a Foxborough.
TOM PENNINGTONAFP

Como casi siempre ocurre con los momentos que tanto anhelamos, el tiempo en la sala de espera se siente mucho más lento de lo normal, es como ver correr a Tom Brady en una jugada rota, pero cuando todo comienza, el reloj se acelera como la espiral de un pase de touchdown del mejor quarterback de la historia.

El primer mes de la temporada 2021 ya forma parte de los libros de récords. En cuatro semanas, la mayoría de las 32 organizaciones se aproximan a cumplir un cuarto del nuevo calendario extendido de la NFL. Como siempre, la liga ha tenido grandes sorpresas, actuaciones individuales destacadas y varias decepciones.

Durante la cuarta semana, la moda de los marcadores apretados se mantuvo y dos partidos necesitaron de tiempo extra para definir al ganador. En las memorias de la liga, es la quinta ocasión (2021, 2018, 2002, 1983 y 1979), que durante cada uno de las primeras cuatro semanas de la campaña, al menos un encuentro se desplegó hasta la prórroga.

Las dos organizaciones de New York que hasta antes del domingo se mantenían sin victorias, fueron los conjuntos que se llevaron el triunfo en tiempo extra. Los Giants superaron un déficit de 11 puntos para derrotar a New Orleans y los Jets pasaron sobre los Titans.

Cualquiera le puede ganar a cualquiera ¿Quién es el verdadero No1 en la NFC?

Las victorias en tiempo extra de los dos equipos de la gran manzana, no fueron los únicos finales inesperados que entregó la Semana 4. Cuando muchos ya tenían a Los Angeles Rams como su carta fuerte para representar a la NFC en el Super Bowl que se disputará en febrero bajo las luces de Hollywood, los Cardinals alteraron el panorama al colocarse con récord de 4-0 por primera vez desde 2022, gracias a una contundente victoria sobre los Rams. Arizona lanzó el balón 32 ocasiones y corrieron otras 40 jugadas. Para la sección de MVP Watch, Iván Pirrón tiene un nuevo legítimo candidato. Kyler Murray obtuvo 286 yardas por pase con dos touchdowns y 39 yardas por tierra. Algunos podrían decir que es una derrota que llega a tiempo para los Rams y sus aspiraciones de jugar en casa el siguiente SB, pero hay otros que pensamos que el resultado del domingo pone a los Cardinals en camino al gran juego.

Dak Prescott es un quarterback con calibre de Super Bowl

Para mantenernos en la NFC y las organizaciones con ambiciones de jugar hasta febrero, los Cowboys nos enseñaron que pueden ser ese sueño que se convirtió en realidad. Quitando un gol de campo que les arrebató el triunfo en la Semana 1 frente a los campeones Buccaneers, el equipo de la estrella solitaria ha desplegado una ofensiva espectacular como rodeo de tres pistas. Contra la defensiva de Carolina que arribó como la mejor en cuanto a capturas y presión de quarterback, Dallas y su jugador franquicia Dak Prescott completaron 14 de 22 pases para 188 yardas y cuatro pases de anotación. Cuando el balón está en las manos del hombre de los 160 millones de dólares, los Cowboys tienen una oportunidad de anotar. El liderazgo de Prescott no sólo se sostiene en sus números. A diferencia de la derrota con Tampa Bay en la que pasó para 403 yardas en 58 intentos, ahora la ofensiva de Dallas ha encontrado respaldo en una vieja fórmula de la casa: correr el balón. Tanto Ezekiel Elliott como Tony Pollard se ha convertido en el complemento perfecto al correr el balón y quitar un poco de presión al brazo de Prescott.

Elliott corrió para 143 yardas y una anotación en la victoria sobre Carolina. El corredor de Dallas tiene 50 TD´s por tierra y 10 recepciones de anotación en 75 partidos en su carrera, es el quinto jugador que alcanza estos números en la historia de la NFL.

Aún es temprano en el año para que Jerry Jones se entorpezca y arruine todo lo conseguido, pero los Cowboys ya aparecen en el radar de equipos contendientes para jugar el SB representando a la NFC y terminar con la sequía de un cuarto de siglo.

Abran paso a los Wagons de los Bills

Como si fuera un pase al pasado cuando Buffalo era reconocido como un equipo robusto y resistente, se presenta esta temporada la defensiva. Por segundo partido en cuatro semanas los Bills no permitieron puntos de su rival. Es el tercer equipo que consigue este hito, el más reciente lo Baltimore Ravens quienes en el 2000 consiguieron el Vince Lombardi. A la ofensiva por tercer encuentro consecutivo, los Bills anotaron 35 o más unidades en la pizarra. El domingo por la noche en horario estelar se enfrentan a los Chiefs en una potencial final de la AFC, veremos qué tan resistentes son los vagones de esta caravana que dirige Josh Allen.

Mahomes sigue siendo Mahomes

Si bien la defensiva de los Chiefs luce como un auto destartalado que urgentemente necesita ingresar a un taller para acomodar sus piezas, Patrick Mahomes nos recordó que no hay rival al que no pueda vencer ni circunstancia que no supere. En la apertura 50 de su carrera, el quarterback de los Chiefs registró cinco pases de touchdowns mientras que su wide receiver Tyreek Hill totalizo 11 recepciones para 186 yardas y tres anotaciones en la victoria sobre Philiadelphia. Andy Reid se convirtió en el primer head coach en la historia de la NFL en alcanzar al menos 100 triunfos con múltiples equipos.

Mahomes tiene récord de 40-10 en sus primeros 50 partidos como profesional. Gana ocho juego de cada 10. Con cinco pases de touchdown en la Semana 4, Mahomes se convirtió en el quinto quarterback con tres pases de anotación o más, en cada uno de sus primeros cuatro juegos de una campaña.

 Fin de una semana emocional

El primer mes de temporada terminó, bajo las luces del domingo por la noche Brady nos enseñó que como casi siempre lo que mejor hace es ganar a pesar de todo y Bill Belichick que posee la capacidad para hacer que hasta el mejor quarterback de la historia luzca como un jugador más.