¿Cuántos aficionados habrá en el Super Bowl LV?
La NFL anunció que el Raymond James Stadium permitirá el acceso a 22,000 fanáticos en el partido por el Vince Lombardi el 7 de febrero.
El Raymond James Stadium volverá a albergar el Super Bowl, pero no será nada similar a las ediciones anteriores, al menos en las gradas. Para ser testigos de la edición LV por el Vince Lombardi, la NFL anunció que únicamente habrá cabida para 22,000 aficionados el 7 de febrero.
Para llegar a tal cifra, la NFL ha establecido conversaciones con oficiales del sector salud, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades y el Departamento de Salud de Florida.
La pandemia de coronavirus ha puesto en jaque todo tipo de competencia deportiva. Algunos eventos como los Juegos Olímpicos de Tokyo, según un reporte de The Times, han sido cancelados. Otros se han pospuesto con drásticos cambios. Pocos han permanecido en pie. La NFL ha lidiado con brotes a lo largo de la campaña —Nashville y Baltimore, entre los que más estragos han causado— y por lo mismo se ha tomado una postura puntual sobre la importancia de seguir los protocolos COVID, precisamente para no aplazar el juego por el campeonato a finales de febrero.
En diciembre, Roger Goodell, comisionado de la NFL, anunció que entonces no se podía dar un número certero pero que intentarían “traer a tantos aficionados como podamos”.
Ahora que hay un número, en un gesto de agradecimiento la liga ha decidido que 7,500 boletos serán regalados a personal médico que ya haya recibido la vacuna y que ha estado en la primera línea durante la pandemia.
Todo el personal médico que recibirá el acceso por cortesía de la NFL pertenece al área de Tampa y el centro de Florida.
Al momento de la publicación de esta nota, de acuerdo con cifras de la Universidad John Hopkins, el estado de Florida es la sexta región en el mundo con el mayor número de casos confirmados; en Estados Unidos ocupa el tercer sitio entre sus entidades.
A pesar de estar en medio de la pandemia y ante la especulación del repunte de casos a finales del otoño, el gobernador de Florida, Ron DeSantis, anunció en octubre que todo evento deportivo en la entidad podía volver a su capacidad máxima.
Los tres clubes de la NFL en ese estado (Dolphins, Buccaneers, Jaguars) hicieron caso omiso y permitieron entrada a aficionados de forma limitada, nunca por encima del 25% de su capacidad.
De ganar el próximo domingo en Lambeau Field, Tampa Bay Buccaneers se convertirá en el primer equipo en jugar el Super Bowl en su propio estadio.