Joe Morgan, leyenda de los Reds, muere sus 77 años
El expelotero, infielder de Grandes Ligas por 22 temporadas (1963-1984), sufría de polineuropatía, condición que genera desorden en los nervios periféricos.
Joe Morgan, integrante del Salón de la Fama y pelotero de Ligas Mayores por más de dos décadas, murió el domingo, a sus 77 años, anunció Cincinnati Reds esta mañana, equipo para el que jugó de 1972 a 1979.
“La familia de los Reds tiene el corazón roto. Joe era un gigante en el deporte y era adorado por los aficionados de esta ciudad. Era de lealtad eterna y dedicado a esta organización que se extendió a nuestro actual equipo y al personal de la gerencia”, sentenció Bob Castellini, CEO de los Reds. “Una piedra angular en uno de los más grandes equipos en la historia del baseball. Sus contribuciones a esta franquicia vivirán por siempre. Nuestros corazones lo sienten por sus compañeros de la Gran Máquina Roja”, añadió.
Morgan, cuya estatura (1.70 m) derivó en su apodo, “Little Joe”, llegó a las Mayores en 1962. Se integró entonces a Colt .45s, ahora Houston Astros, y finalizó segundo en la votación por el novato del año en 1965, temporada en la que alcanzó la elegibilidad para tal galardón.
En 1971, Morgan fue enviado a los Reds después de varias temporadas en las que no logró brillar en Houston. Sin embargo, una vez en Cincinnati, su juego se desenvolvió con mayor facilidad y madurez. En temporadas consecutivas, en 1975 y 1976, Morgan fue galardonado con el premio del Jugador Más Valioso, años en los que destacó de ambos lados del plato, bateando para .327 y .320, respectivamente, y llevándose el Guante de Oro en ambos calendarios.
“Simplemente era un buen pelotero ligamayorista cuando no significaba nada”, lo describió tiempo atrás Sparky Anderson, compañero de Morgan en los Reds y exetratega de Detroit Tigers. “Pero cuando significó algo, se convirtió en integrante del Salón de la Fama”, añadió.
Considerado un toletero de gran capacidad intelectual para comprender un deporte que genera infinidad de posibilidades, Morgan era capaz de encender la chispa en el club de los Reds como pocos peloteros para sus equipos. Su dominio de los fundamentos lo ubicaron entre los grandes de aquel equipo de los Reds que se consagró dos veces en la Serie Mundial.
Eso fue lo que ocurrió en nueve temporadas, al terminar con 40 o más bases robadas, y líder de porcentaje en base y base por bolas cuatro veces, atributos de discriminados en el baseball contemporáneo.
Palmarés
Morgan fue campeón en dos ocasiones con los Reds, obtuvo también dos premios de MVP, un Bate de Plata, cinco Guantes de Oro, un MVP del All-Star Game en 10 participaciones, y fue inmortalizado en Cooperstown en 1990.
Morgan vistió la playera de los Astros, Reds, Giants, Phillies y Athletics.