Jimmy Garoppolo aprueba el examen en el Superdome
Fue la sexta ofensiva ganadora que “Jimmy G” comanda en el cuarto periodo y tercera en la presente campaña; ya lo había hecho contra Pittsburgh y Arizona.
El juego estaba en la línea. Cuarto down, dos yardas por avanzar y 39 segundos en el reloj. La gente en el Superdome hizo su parte, con mucho ruido para presionar a la ofensiva de los 49ers.
El coach Kyle Shanahan mandó la llamada correcta y fue con su mejor hombre, el tight end George Kittle.
Jimmy Garoppolo recibió el centro desde la Shotgun, esperó a que Kittle cruzara hacia la banda izquierda y conectó con él; Kittle rompió fácilmente la primera tacleada y comenzó a ganar yardas, llegaron los defensivos de New Orleans y no pudieron derribarlo. El safety Marcus Williams tuvo que sujetarlo de la barra y eso le costó a los Saints otras 15 yardas.
“George estaba hombre a hombre. Simplemente corrió una ruta recta y mató al tipo. Hizo mi trabajo es fácil. Fue asombroso”, dijo Garoppolo.
Pase de siete yardas y 31 más de Kittle después de la recepción. Más el castigo, claro.
Tres jugadas después, Robbie Gould conectó el gol de campo de 30 yardas que la dio el triunfo a San Francisco en el juego del año y que muy probablemente evitará que tenga que volver al Superdome en enero.
Kittle hizo la jugada clave, pero fue Garoppolo quien aprobó con excelentes calificaciones este duro examen.
El quarterback de los Niners completó 26 de 35 para 349 yardas, con cuatro pases de touchdown, incluido un bombazo de 75 yardas a Emmanuel Sanders, el más largo de su carrera.
Garoppolo se enredó en un duelo de pistoleros con Drew Brees y respondió con su tercer juego de 300 yardas en la campaña, quinto de su carrera.
“Es increíble. Pase lo que pase”, dijo Shanahan. “Ha tenido muchos juegos buenos este año. Ha habido algunas veces en las que cometió algunos errores. Pero es el mismo tipo todos los días. El hecho de poder lidiar con el ruido de la multitud y lidiar con la adversidad durante el juego… poder lidiar conmigo”.
En un juego en el que Brees lanzó cinco pases de touchdown, el último de ellos con un minuto en el reloj del cuarto periodo, Garoppolo tenía que responder. Y lo hizo.
“Creo que le da mucha confianza. Creo que a él no le han importado los detractores y lo que el mundo exterior ha pensado todo este tiempo”, dijo el veterano cornerback Richard Sherman. “Creo que es una llamada de atención para ellos sobre el quarterback que puede ser en los momentos clave y momentos cruciales del juego. Creo que ha habido muchas preguntas y él respondió las preguntas hoy”.
Fue la sexta ofensiva ganadora que “Jimmy G” comanda en el cuarto periodo y tercera en la presente campaña. Ya lo había hecho contra Pittsburgh y Arizona.
Pero esta fue la más importante de todas, pues con este triunfo San Francisco retoma el primer lugar en la siembra de la Conferencia Nacional y tiene de su parte el criterio de desempate en caso de terminar con el mismo récord de los Saints.
Y en el momento más álgido del partido, él fue simplemente “Jimmy Cool”.
“Todos estaban tranquilos. Creo que estábamos en un buen estado mental. Sólo ejecutamos lo que se necesita hacer en esas situaciones”, dijo Garoppolo, refiriéndose a la jugada en cuarto down con Kittle. “Una vez que atrapó el balón y se dio la vuelta, no sabía lo que iba a hacer. Sabía que el tipo del otro lado estaba en una mala situación. George es una bestia con el balón en sus manos”.
Los 49ers terminaron 2-1 la durísima racha de juegos ante Green Bay, Baltimore y New Orleans. En ese lapso, “Jimmy G” completó 72% de sus envíos, con un promedio de 255.6 yardas por partido, siete touchdowns y una sola intercepción.
Con marca de 11-2, los Niners cierran la campaña con juegos en casa ante Atlanta y Rams para luego visitar a los Seahawks, uno de los dos equipos que han sido capaces de vencer al equipo de Shanahan.
Pero si Garoppolo es capaz de resolver los juegos cerrados como hasta ahora, nada ni nadie impedirá que San Francisco esté de regreso en el Super Bowl.
Y no, no creo que sea contra Brady.