Sobreponerse a una enfermedad es complicado, pero para un atleta es un proceso más largo, pues incluso los puede marginar definitivamente de su profesión.
Cuando se piensa en un atleta, suele habitar la idea de que son seres intocables, que nada les puede hacer daño, aunque la realidad está muy alejada de esto. Ni los deportistas de élite están exentos de problemas de salud. Incluso Lionel Messi, quien este lunes ganó su sexto Balón de Oro, tuvo que vivir su juventud en tratamientos médicos.
Por este motivo, se repasarán casos destacados de atletas que vivieron en carne propia una enfermedad o afección médica solo para superarla.
Fútbol internacional
Lionel Messi
La carrera de Messi corrió peligro cuando se le detectó un déficit en la hormona del crecimiento. Al pequeño Lio le preocupaba no poder jugar de forma profesional debido a este problema, pues con 10 años tan sólo medía 1.25 metros.
El astro argentino acudió con el médico Diego Schwarzstein, quien le prometió que lograría medir más que Maradona. Al principio sus padres se encargaban de inyectarlo en las piernas, cada día la alternaban, hasta que terminó por hacerlo él.
El tratamiento de Messi era sumamente caro, costaba 1300 dólares por mes. Al principio su padre se hizo cargo de pagarlo, pero una crisis laboral en Argenita hizo que su progenitor no pudiera continuar costeando la cura, hasta que lo llevó a probarse con el Barcelona, equipo que continuó el tratamiento hasta el final.
Nwankwo Kanu
El astro nigeriano estuvo a punto de dejar su carrera a la edad de 20 años, cuando se le detectó una insuficiencia valvular en la aorta. Los médicos determinaron que la prodigiosa carrera del ariete debía finalizar ya que su corazón no respondería a las exigencias físicas del fútbol, pues su vida estaba en riesgo.
A pesar de esto, Kanu quiso seguir dentro del balompié y se sometió a una operación en Estados Unidos en la que se le sustituyó la arteria aórtica, estuvo seis meses de baja y pudo recuperarse.
Eric Abidal
El histórico lateral francés, quien vivió una carrera llena de trofeos con el Barcelona, recibió una durísima noticia en 2011, cuando se le diagnosticó cáncer de hígado y unos días después de que se difundió la noticia, llegó la operación. La recuperación fue sumamente rápida, ya que en cuestión de un mes y medio, se le vio nuevamente en las canchas.
Pero ahí no terminó el problema, pues un año después sufrió una recaída, el futbolista recibió un trasplante de hígado para poder salvar su vida. Su primo Gérard fue quien ayudó al jugador al donarle un trozo de este órgano. Esto pudo haberlo dejado fuera de las canchas, o al menos eso estipularon los doctores, pero Abidal se repuso y tras 402 días sin jugar, volvió a pisar el Camp Nou.
Germán Burgos
Durante marzo de 2003, al portero del Atlético de Madrid se le diagnosticó un tumor maligno en el riñón izquierdo, por lo que tuvo que ser sometido a una intervención quirúrgica en una clínica de Madrid en donde logró que se le extirpara.
Luego de esto, el argentino aceptó que la enfermedad llegó por fumar desde los 17 años, por lo que prometió a su afición que dejaría el tabaco.
Jaime Penedo
El arquero panameño sufre una deficiencia congénita cardiaca que con el esfuerzo físico le produce arritmia (un trastorno de la frecuencia cardiaca), la cual pudo terminar con su vida dentro de las canchas.
No obstante, el meta canalero tuvo una prolífica carrera en el fútbol guatemalteco y la MLS ─además de probar suerte en Europa─ que se prolongó por dos décadas.
Deporte internacional
Alberto Contador
El ciclista español vivió uno de los momentos más complicados de su carrera justo a un año de su debut. En 2004, el nacido en Madrid sufrió un accidente en la Vuelta de Asturias y tras un incidente en casa de sus padres, se le detectó una hemorragia cerebral ocasionada por un cavernoma, por lo que fue intervenido. Siete meses después, Contador pudo volver a los entrenamientos.
Venus Williams
La mayor de las hermanas Williams tuvo que abandonar el US Open de 2011 al ser diagnosticada del Síndrome de Sjögren, una enfermedad autoinmune que causa fatiga muscular y dolor en las articulaciones. Tras poco menos de un año regresó para participar en los Juegos Olímpicos de Londres, donde ganó el oro en compañía de su hermana.
Magic Johnson
Previo al inicio de la temporada de 1991 de la NBA, el miembro de Lakers fue detectado como portador de VIH. El basquetbolista reveló que contrajo la enfermedad al tener relaciones sexuales sin protección y decidió retirarse. No obstante, Johnson regresó a la liga en el Juego de las Estrellas de 1992 y más adelantó representó a Estados Unidos en los Juegos Olímpicos de Barcelona, donde conformó el ‘Dream Team’.
Oscar Pistorius
El famoso atleta sudafricano sufrió amputación de sus extremidades bajas debido a hemimelia fibular, naciendo sin peronés. No obstante, ‘Blade Runner’ no se rindió y logró llegar los Juegos Olímpicos en 2012, convirtiéndose en el primer deportista amputado en participar en una justa veraniega.
Niki Lauda
Durante el Gran Premio de Alemania en 1976, el piloto austriaco se vio involucrado en un accidente donde sufrió quemaduras de tercer grado en la cabeza, además de inhalar gases tóxicos que dañaron sus pulmones, lo que lo llevó al retiro en 1978. No obstante, en 1982 regresó a la Formula 1 con McLaren para ganar el título de 1984.
Lance Armstrong
En 1996, tras cuatro años de haber debuto en el ciclismo profesional, Armstrong fue detectado con cáncer testicular en estado avanzado. El tratamiento duró tan solo un par de meses, pero fue suficiente para vencer la enfermedad y convertirse en uno de los referentes de su disciplina ─a pesar del consumo de esteroides.
Rafa Nadal
En 2012, el tenista español no pudo participar en el Abierto de Estados Unidos y Juegos Olímpicos debido a una enfermedad. Más adelante, el nacido en Mallorca reveló que sufría la enfermedad de Hoffa, la cual le provoca inflamación crónica.
James Conner
El ahora running back de Steelers vivió momentos de angustia cuando jugaba para la Universidad de Pittsburgh. Conner fue diagnosticado de linfoma de Hodgkin, un tipo de cáncer que afecta el sistema linfático. A pesar de que los médicos le dieron una semana de vida, el corredor venció a la enfermedad y vio cumplido su sueño de llegar a la NFL.
Michael Phelps
El deportista más ganador en la historia de los Juegos Olímpicos fue detectado con desorden de hiperactividad cuando tenía 11 años (lo que le ayudó en la natación). Además, padece Síndrome de Marfan, el cual afecta la espalda.
Bethany Hamilton
A los 13 años de edad, Hamilton fue atacada por un tiburón en las playas de Hawái, perdiendo su brazo izquierdo en el incidente. No obstante, esto no detuvo a la surfista, quien hasta la fecha ha conseguido seis medallas de oro en competencias de la disciplina.