La caída del Imperio Romano
No hay una nueva quinta del Buitre y se demuestra que no hay futuro en el Real Madrid cuando el presente, que era Ceballos, lo regalaron al Arsenal.
Sin jugar a nada serio, sin una filosofía de club como solía tener en la época dorada de los setenta y ochenta y sin tener la ventaja competitiva del dinero del que se benefició durante la última década después de que Mediapro les “regalase” (como al Barça) mil millones durante diez años, se acabó el Imperio Blanco.
Cual Ave Fénix y con Ronaldo como matador pudieron llevarse tres Champions sin saber cómo. Nunca se sabrá cómo pudo producirse semejante carambola, pero la hubo y eso se lo lleva la historia.
Sin embargo, se acabó. No hay una nueva quinta del Buitre y se demuestra que no hay futuro cuando el presente que era Ceballos, lo regalaron al Arsenal. La magia se regala.
No hay competencia, solo está Florentino y no es malo, pero cuando tienes competencia, ésta te hace ser mejor y el Presi lleva durmiendo cinco años.
De hecho el Atlético lleva dos años quedando por delante del Madrid en la Liga.
La única diferencia con el Barça es que Messi todavía está, pero le quedan dos años. Poco más y luego los del Barça caerán.
En cambio, en el Madrid la pregunta que se hacen es: “¿a quién fichamos?” y la respuesta es desoladora: “no hay nadie”.
Y allí está el problema. No se puede fichar a nadie porque no hay nadie.
Si Hazard tiene que ser la piedra generadora del Madrid, apaga y vámonos.
El AC Milan lleva años durmiendo y ya no se le espera. Incluso ficharon a Bonucci y les duró un año y se volvió a la Juve.
Es una tristeza que uno de los grandes, por no decir el más grande, esté cayendo en picado y no haya nadie que diga nada.
Supongo que como en Roma hace unos mil cuatrocientos años, nadie se llegó a creer que el mayor Imperio de la historia también desapareció, sin más y no volvió. Esperemos que al Madrid no le pase lo mismo.