NFL: Un siglo dejando atrás a toda la competencia
A lo largo de 100 años, la NFL ha logrado derrotar a una larga lista de rivales para posicionarse como la mejor liga de football del mundo.
No se puede llegar a vivir 100 años sin librar todo los obstáculos en el camino. Tampoco se puede llegar a lo más alto del poder sin dar cuenta de todos tus enemigos.
En eso se resume la historia de la NFL, que está a 100 días de celebrar su primer siglo de vida.
Desde su nacimiento en 1920, la NFL ha encontrado adversidades a la vuelta de cada esquina. Desde una marcada desorganización en su primera década de vida _ incluyendo falta de calendarización y prácticamente nulos criterios para designar a un campeón por consenso _ hasta la creación de ligas rivales en busca de un pedazo del pastel.
AFL, la primera prueba en contra de la NFL
La primera gran amenaza para la NFL llegó con la creación de la primera de cuatro ligas distintas que optaron por tener el mismo nombre: American Football League, en 1926 y la segunda AFL en 1936 y 37. Así como la All-American Footaball Conference inmediatamente después de la Segunda Guerra Mundial (1946-1949).
De la primera versión de la AFL solo queda un borroso recuerdo. De la segunda, un poco más: La creación de los Los Angeles Rams, quienes se integraron a la NFL en 1936.
La situación con la AAFC es un poco más complicada.
Después de su fundación por el editor de la sección deportiva del Chicago Tribune, el comisionado de la NFL Elmer Layden dijo que la nueva liga “primero debería conseguir un balón, luego hacer un calendario y después jugar”.
Palabras cargadas de soberbia para una liga que en su momento llegó a tener una mejor cobertura de medios, mayores asistencias a los estadios y grandes nombres entre los propietarios de equipos, como Louis B. Mayer (MGM).
Eso no fue suficiente para sobrevivir y en 1949 ambos equipos acordaron una fusión de la que, como ejemplo, sobreviven los Cleveland Browns y los San Francisco 49ers.
La NFL había aprendido dos valiosas lecciones: Tomar prisioneros y firmar alianzas.
Le resultaron útiles poco tiempo después, cuando la cuarta y última AFL se fundó en 1960, convirtiéndose en el más formidable rival que ha enfrentado la NFL a la fecha.
Creada por dueños a los que se les negó un equipo de expansión en la NFL, la AFL tuvo un éxito meteórico impulsado por dos importantes contratos televisivos y franquicias estables. Eso fue suficiente para comenzar a atraer una buena dosis de talento a nivel colegial y a forzar la mano del comisionado Pete Rozelle, quien no tuvo más opción que establecer una fusión de ambos circuitos en 1966, y cuatro años más tarde absorber por completo a la AFL.
Las ocho franquicias iniciales de la vieja American Football League persisten hasta ahora: Jets (Titans), Patriots, Bills, Oilers, Chargers, Broncos, Raiders y Chiefs.
Reforzada con el respaldo de otras ocho nuevas y estables franquicias, la NFL _ ahora con 20 equipos _ jamás volvería a enfrentar una amenaza real.
USFL, con poco potencial para ser rival de NFL
En 1982 llegó la USFL, un experimento que duró apenas tres años y que en su afán por competir directamente con la NFL y forzar una nueva alianza, solo puede presumir un rotundo y anecdótico fracaso.
La United States Football League tuvo un sólido inicio gracias, en parte, a un calendario de verano que no se sobreponía con el de la NFL, ofreciéndoles a los aficionados más football el resto del año, y a un excelente producto en el campo con jugadores de la talla de Steve Young, Jim Kelly y Reggie White.
Pero la ambición de la USFL por competir o integrarse a la NFL _ o en el peor de los casos obtener una compensación suficientemente grande para rescatar a la liga de sus problemas financieros _ llevó al dueño de los Genrals de New Jersey, un señor de nombre Donald Trump, a demandar a la National Football League por prácticas monopólicas.
La corte falló a favor de Trump y la USFL. ¿La compensación? Un dólar (más tarde incrementado a tres) y el resultado final: el fin de la USFL y una valiosa lección para cualquiera que pretendiera enfrentar en el futuro a la NFL.
Después llegaron ligas como la XFL, la UFL y la AAF, ninguna de ellas con más de tres años de vida, porque ninguna de ellas contó con la paciencia y los sólidos fundamentos necesarios para sobrevivir un siglo.