Carr y Cook guían a los Raiders a su primer triunfo de la campaña
Cleveland sigue sin sumar victorias consecutivas desde noviembre de 2014
Derek Carr demostró que aún es un quarterback confiable. Los Browns, por otro lado, demostraron que siguen siendo, bueno, los Browns.
Carr encontró a Cook para un pase de touchdown de 7 yardas y completó con Jordy Nelson la conversión de dos puntos a 30 segundos del final, Matt McCrane consiguió un gol de campo de 29 con 146: por jugar n el tiempo extra y los Raiders vienen de atrás para vencer 45-42 a Cleveland.
Cleveland tuvo múltiples oportunidades de firmar su segundo triunfo consecutivo, algo que no presumen desde noviembre de 2014. En lugar de eso, se vieron como el equipo que ha sumado apenas tres triunfos en sus últimos 37 partidos.
Baker Mayfield, quien el jueves había encaminado a los Browns apenas a su primera victoria en 635 días, descubrió que la segunda vez es más difícil. Lanzó dos intercepciones, incluyendo una devuelta a touchdown en el primer cuarto y perdió dos balones que Oakland convirtió en 14 puntos en la segunda mitad. A pesar de todo eso, Cleveland tuvo sus oportunidades.
Abajo en el marcador 34-28 a 10:46 del final, Mayfield comandó dos series de touchdown para poner a Cleveland al frente y en rumbo a su segunda victoria de la campaña. Carlos Hyde devolvió la ventaja a los Browns con acarreo de una yarda y cuatro minutos después el novato Nick Chubb se escapó 41 yardas por el centro para colocar el marcador 42-28.
Cleveland solo tenía que detener a Oakland. Lo hizo una vez, la segunda ocasión, nuevamente, resultó más complicada.
A Carr le tomó 58 segundos recorrer 53 yardas y encontrar a Cook con su cuarto pase de touchdown de la jornada para darle a los Raiders su primera victoria de la campaña y al coach Jon Gruden su primer triunfo desde el 30 de noviembre de 2008.
Carr completó 35 de 58 envíos para 437 yardas y explotó a Cook con dos pases de touchdown y Amari Cooper finalizó con 8 recepciones para 128 yardas y un touchdown.
El novato Mayfield no pudo aprovechar las 208 yardas terrestres que le colaboraron Chubb y Hyde, y cometió cuatro pérdidas de balón que resultaron en miles de corazones rotos en Cleveland. No es que no estén acostumbrados.