Los 5 mayores reboteadores en los Playoffs de la NBA
En la época romántica del baloncesto, quienes dominaban el tablero dominaban el juego. Por ello, los nombres en esta lista pertenecen a una era distinta. Final en vivo: Celtics vs Cavs
En la lucha por los tableros inicia el juego. La génesis del baloncesto está en la batalla por bajar las pelotas que rebotan del aro o del cristal. De ahí surje todo: es el combustible, la mecánica del juego mismo. Quien gane la tabla, gana el partido. Eso sí, en los últimos años, el basquetbol ha mutado y sus fundamentos tácticos han evolucionado. En la tabla, por diseño y definición, siempre iniciarán y terminarán las ofensivas, pero el principal campo de batalla se ha mudado al perímetro: los triples, el tiro a distancia, el ritmo alto y las posesiones ciclónicas. Esa es la NBA de hoy, que entiende que el trabajo sucio en la pintura no es el eje del juego, como sí lo fue en antaño, cuando el tiro exterior ni siquiera figuraba en los reglamentos y no hacía diferencia embocar a distancia o hacerlo bajo el tablero, en lucha de gigantes, arañazos y porrazos de por medio. El juego es otro. Pero sus vestigios quedan.
Recordamos a los cinco mejores reboteadores en la historia de los playoffs de la NBA, recuerdos de la era de los pívotes, los ganchos, los manotazos y los hombros magullados; la NBA física y no circense.
5 - Kareem Abdul Jabbar
El máximo anotador de todos los tiempos en la historia de la liga y el tercero en playoffs; en postemporada jamás encestó un triple. A decir verdad, nunca necesitó del tiro a distancia para lograr sus 38,387 puntos de por vida. Su dominio de la llave, su inmortal tiro de gancho y su capacidad para trazar el cerco reboteador le valieron para hacerse un lugar muy especial en la historia de la NBA. Bajó 2,481 pelotas para un promedio de 10.5 por partido de playoffs.
4 - Shaquille O'Neal
Heredero de las glorias de Kareem, con un estilo similar, un tanto más volcánico, más rústico, más poderoso (50 kilogramos más, también habrá que apuntar). Tampoco necesitó el tiro exterior (un triple en toda su carrera), pero, a diferencia de Kareem, el triple ya estaba instaurado desde su año de novato. Abdul Jabbar se mostró reticente a aprenderlo, a 'Shaq' nunca le importó. Vivió, en gran medida, por su insólita capacidad de recolectar decenas de rebotes cada noche: 2,508 tableros dominados y un promedio de 11.6 por noche de post-temporada.
3 - Tim Duncan
El 'Señor de los Fundamentos' fue, quizá, el último basquetbolista forjado a la vieja usanza. Pocos dominaron la llave como él, así como los movimientos de piernas y su tiro predilecto: cristal y aro. Futuro salón de la fama, bajó 2,854 rebotes en 251 encuentros para promediar 11.4 en playoffs. Solo los Spurs tuvieron la suerte de contar con él en sus filas. Eso sí, su tiro exterior mejoraba notororiamente al de 'Shaq'.
2 - Wilt Chamberlain
El prototipo del basquetbolista de antaño, el símbolo de la antigua NBA y de la anterior forma de entender el juego. En Warriors, Sixers y Lakers, Chamberlain, un virtuoso del juego (ex Harlem Globetrotter) limpió las pinturas de todas las arenas de baloncesto profesional en Estados Unidos. 3,913 rebotes y un bestial promedio de 24.5 por partido ilustran a cabalidad un juego mucho más interno, en el que cada batallla por el rebote era tan definitoria como lo es un triple hoy en día.
1 - Bill Russell
En el mismo orden de ideas y contemporáneo de Chamberlain, está el máximo campeón en la historia de la NBA, otro símbolo de una época romántica en el baloncesto estadounidense. Vestido exclusivamente con los colores de los Celtics, Russell labró un récord que muy dificilmente será superado: 4,105 rebotes en 165 enfrenamientos; un irrisorio promedio de 24.9. Números fuera del alcance para cualquiera en estos tiempos.