El Athletic empieza a dar por perdido a Kepa Arrizabalaga
En algo más de un mes el portero podrá negociar con quien quiera. El Athletic ve complicado retenerle y el Madrid está muy bien posicionado.
El Athletic lleva sin disfrutar sobre el campo de fichajes desde 2015, con Raúl García , aunque al menos sí ha logrado una contratación el pasado septiembre: Ander Capa, con el que cuenta desde la temporada próxima. El mayor empeño de la entidad es no dejar salir a sus grandes valores de la cantera. Y una de las figuras más rutilantes del futuro es Kepa Arrizabalaga, el meta que ha entrado en los planes del seleccionador, Julen Lopetegui, en las últimas citaciones y que apunta a ir al Mundial de Rusia del año próximo.
Ibaigane se ha encontrado con un hueso muy duro de roer en el caso de la renovación del joven portero. Como adelantó AS hace meses, el Madrid lleva siguiendo muy de cerca este proceso desde su origen. Las diferencias en cuanto a la cláusula de rescisión y su correspondencia en la ficha son un escollo que amenaza con cerrar la etapa del ondarrutarra en el club en el que se ha formado desde crío. En poco más de un mes y medio, será libre de hablar con quien quiera y por eso, como pasó con Donnarumma recientemente, se ha convertido en el guardameta más deseado del momento.
Sin fórmulas. El Athletic no encuentra la fórmula para atar a su perla, aunque la intención de Arrizabalaga siempre ha sido escuchar primero a su club. Este propone una escala salarial que iría creciendo en los cuatro años que se ofrecen pero partiendo de la cláusula más alta de la plantilla, cercana a los 75 millones (Laporte tiene 65, ampliable a 70 desde la campaña próxima, y es el techo). Los agentes de Kepa esgrimen que si va a tener el blindaje más alto su ficha deberá estar en ese mismo tramo. Existe la opción de situarla en 40 o 50 millones, con un salario más bajo, aunque no era una estrategia de partida para el presidente Urrutia. Ambas partes se podrían estar moviendo en un acuerdo sobre la ficha en torno a los 2,2 millones.
Pero el Madrid le pondrá en bandeja un contrato suculento, irrechazable y hay más clubes que están al acecho, como el Barcelona, con un Valverde que lo conoce bien de Bilbao y le dio mucha confianza el año pasado (aunque la figura de Ter Stegen supone un tapón), e incluso la Juventus y un par de clubes de la Premier. Días atrás, el presidente rojiblanco se mostraba cauto sobre el asunto: “Los que se quieren quedar aquí, se quedan. El jugador tiene que poner de su parte, no solo el club”. Además, el mandatario mandó un mensaje al meta: “Kepa es muy bueno, pero lo que hemos logrado en los últimos tiempos no ha sido con él”. Blanco y en botella...
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