Ward se retira del boxeo: "Mi cuerpo ya no puede aguantarlo"

El mundo del boxeo continúa en shock tras ser sorprendidos por el adiós de uno de los grandes campeones del momento, Andre Ward. El estadounidense, de 33 años y con un récord de 32-0 (16 KO), ha decidido retirarse del pugilismo en el mejor momento de su carrera, ya que posee los cinturones WBA, WBO e IBF del peso semipesado.

La noticia ha cogido por sorpresa a los aficionados, aunque hace unos días publicó una foto en sus redes sociales en las que mostraba su legado. Algo que no se interpretó por su retiro, sino como un reto a nuevos aspirantes.

Además del invicto, Ward se marcha con un oro olímpico en Atenas 2004, ocho títulos mundiales y dos unificaciones: una en el peso supermedio y otra en el semipesado. El estadounidense ha sido uno de los protagonistas del último año. Decidió subir de peso a mediados de 2015, y tras un año y medio de parón, con el objetivo de enfrentarse al auténtico dominador de la categoría: Sergey Kovalev. Se adaptó a su nueva división y encontró su combate. Le ganó, con polémica, en noviembre de 2016.

Le había quitado su invicto y sus títulos. El ruso tenía opción de revancha y la hizo efectiva, pero Ward coqueteó con la jubilación. Muchos le acusaron de evitar al excampeón y aceptó la secuela.

Le noqueó, de nuevo con polémica, pero fue muy superior y disipó todas las dudas. Con esa victoria todo apuntaba a otro gran cartel en el que fuese el protagonista, pero Ward no ha querido mirar más allá. Su cuerpo no le ayuda. "Me voy porque mi cuerpo ya no puede soportar los rigores del deporte y por lo tanto mi deseo de pelear ya no existe. Si no puedo dar a mi familia, mi equio y los fans todo lo que tengo, entonces no debería estar peleando", afirmó en un comunicado en su página web que tituló 'Misión Cumplida'. Lo hizo, ya que cada reto que se puso lo cumplió. Ahora disfrutará de su legado.