Manda Verstappen, brilla Sainz y Alonso, 11º y con dificultades

Esperaban los mecánicos de McLaren Honda con sus instrumentos en la mano unos, con los brazos cruzados otros. Jenson Button era remolcado después de apenas una vuelta en Singapur. Dentro del box sonreía Fernando Alonso. Al asturiano le estaban cambiando la configuración de la interfaz del coche, es decir la relación de todos los sistemas del monoplaza. En 45 minutos apenas dieron tres vueltas entre los dos. Así empezó el equipo británico un gran premio que debería ser el de su regreso a los puestos de arriba. Finalmente el español terminó undécimo a 2,3 segundos del mejor con 18 vueltas completadas y el inglés decimosexto a 3,7 con 16 vueltas. Estos son los datos.

Mientras, por delante se producía la circunstancia de que los dos Red Bull lideraron la clasificación con apenas 49 milésimas de ventaja de Verstappen sobre Ricciardo, pero lo han hecho (como casi todos) con los ultrablandos, mientras que Mercedes se quedaron cuarto y quinto, Hamilton y Rosberg, a seis décimas con los superblandos. Habrá que ver qué sucede cuando monten los compuestos de mayor agarre en este circuito.

Tras los coches energéticos el Ferrari de Vettel, a medio segundo, los dos Mercedes, Kimi y en séptima posición un magnífico Carlos Sainz. El madrileño le metió siete décimas a Kvyat, su compañero de equipo y al final se quedó a una décima del Ferrari de Raikkonen. Este es un circuito en el que su coche debe ir mejor, pero este puesto, créanme, es sobre todo y ante todo, de piloto. Sigue la noche en Singapur…

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