Donald Trump muestra su apoyo a imponer la pena de muerte a traficantes de drogas

El expresidente Donald Trump visitó Washington, D.C, por primera vez desde que dejó el cargo hace 18 meses para participar en la cumbre de dos días del America First Policy Institute.

Durante su discurso, el empresario abarcó varios temas, desde el tráfico de drogas, las personas sin hogar, la situación actual del país, así como de mantener las leyes y el orden, en sus primeras palabras en la capital del país después del asalto al Capitolio del 6 de enero de 2020.

Donald Trump muestra su apoyo a imponer la pena de muerte a traficantes de drogas

Sobre el tráfico de drogas, el expresidente Trump expresó comenzó explicando que Estados Unidos debería modelar su estrategia para los traficantes de drogas a partir de la de países autoritarios como China, donde se ejecutan a esas personas.

“Si miras a los países de todo el mundo, los que no tienen un problema con las drogas son aquellos que instituyen un juicio muy rápido: pena de muerte para los traficantes de drogas”, dijo Trump en su discurso.

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Trump también señaló que Estados Unidos se ha convertido en un “pozo negro de delincuencia” y una “zona de guerra” desde que dejó la Casa Blanca, mientras pidió que se restableciera urgentemente la ley y se enviará la Guardia Nacional para “restaurar el orden... sin tener que esperar la aprobación de algún gobernador que piensa que es políticamente incorrecto llamarlos”.

“Tenemos sangre, muerte y sufrimiento en una escala que alguna vez fue impensable debido al esfuerzo del Partido Demócrata por destruir y desmantelar las fuerzas del orden... Tiene que parar y tiene que parar ahora”, dijo.

Entre otras propuestas, el expresidente pidió colocar patrulleros de la policía en cada esquina, trasladar los campamentos de personas sin hogar fuera de las principales ciudades, aprobar leyes para dar a la policía más autoridad y fortalecer la inmunidad calificada para que las fuerzas del orden no teman las repercusiones.

Además, pidió una “campaña nacional sin restricciones para desmantelar las pandillas y el crimen callejero organizado en Estados Unidos”, así como esfuerzos para derrotar la violencia “y ser duros, desagradables y malos si es necesario”.