La industria deportiva rusa ya perdió más de 3,000 mdd
Las pérdidas deportivas, derivadas de sanciones, que ha resentido Rusia por su conflicto con Ucrania ya ascienden a más 3,200 millones de dólares
La industria relacionada al deporte en Rusia ha comenzado a sentir las pérdidas económicas. Y no son pocas. Hasta el momento, entre cancelación de patrocinios, eventos y anuncios de venta de clubes, los rusos, las marcas deportivas y los clubes ven esfumarse 3,229 millones de dólares, por lo menos.
El conflicto bélico entre la nación encabezada por Vladimir Putin contra Ucrania ha desatado fuertes presiones a su economía por parte de los países que se oponen a la invasión. Las sanciones en el ámbito deportivo forman parte del rechazo a la guerra y las cifras comienzan a brotar.
Roman Abramovich, magnate ruso, ha sido dueño del Chelsea desde 2003 y ha conquistado las únicas dos Champions Leagues que posee en sus vitrinas. Sin embargo, ante las circunstancias decidió poner a la venta al club valuado en 2,115 mdd, de acuerdo con la firma KPMG.
“Como he dicho antes, siempre he tomado decisiones pensando en el mejor interés del equipo. En la situación actual, por lo tanto, he tomado la decisión de vender el club, yo que creo que es lo mejor para los fanáticos, los empleados, así como los patrocinadores y socios”, reveló el empresario mediante un comunicado de prensa.
Ese desprendimiento es el más fuerte que ha tenido en estos tiempos la industria deportiva rusa. Pero está lejos de ser la única.
Adidas puso fin al patrocinio a la selección rusa. Ese convenio significaba una facturación para la firma deportiva de 650 mdd.
Los clubes también han tomado decisiones importantes en cuanto a romper los vínculos comerciales con socios de Rusia.
El Manchester United reveló que cancelaba su relación con Aeroflot, la aerolínea a la que consideraba “la más segura”. El contrato entre ambas entidades expiraba hasta 2023 y ascendía a 53 millones de billetes verdes.
La UEFA, la Superliga de Basquetbol y Schalke 04 rompieron con Gazprom, la principal gasera rusa y con la que contaban con un acuerdos que sumaban de más de 100 mdd.
“UEFA ha decidido poner fin a su asociación con Gazprom en todas las competiciones. La decisión entra en vigencia de inmediato y cubre todos los acuerdos existentes, incluida la Champions League, las competiciones de selecciones nacionales y la Euro 2024”, emitió el organismo del balompié europeo el 28 de febrero pasado.
CANCELACIÓN DE EVENTOS PEGA
El mundo deportivo ha marginado a Rusia de las competiciones internacionales más relevantes.
La propia UEFA y la Fórmula 1 decidieron evitar celebrar sus eventos en el territorio ruso. La final de la Champions que se iba a celebrar en San Petersburgo se mudó a París, Francia, mientras que el Gran Premio de Sochi fue cancelado.
El Comité Olímpico Internacional y el Consejo Mundial de Boxeo anunciaron que no se llevará a cabo ninguna competencia atlética en la Federación Rusa.
“Pedimos a las Federaciones que no inviten ni permitan la participación de atletas y funcionarios rusos y bielorrusos en competiciones internacionales. Se debe hacer todo lo que esté a su alcance para garantizar que ningún atleta o funcionario deportivo de Rusia o Bielorrusia pueda participar bajo el nombre de su país”, solicitó el COI.
Aún no hay en el horizonte un fin claro al conflicto bélico, pero la economía deportiva rusa ha comenzado a padecer.
PÉRDIDAS DE INDUSTRIA RUSA
*Valor según KPMG