Aficionado que lastimó a Giovanni Reyna fue arrestado
En la celebración del último gol Estados Unidos contra México en la Nations League, fanáticos agredieron a jugadores lanzado distintos objetos al campo.
El regreso a los estadios, principalmente en los Estados Unidos, ha devuelto una alegría inigualable, ya sea en el béisbol, el básquetbol o el mismo fútbol. Gracias al programa de vacunación en contra del COVID-19 se ha podido traer de vuelta más gente a los inmuebles, pero ello también ha tenido detalles como los espontáneos en la NBA y también sus agresiones, las cuales se hicieron presentes en la final de la CONCACAF Nations League.
Como es bien sabido, cuando la Selección de México juega en Estados Unidos, ésta, prácticamente, juega de local y en Denver no fue la excepción. El ruido mexicano se hizo sentir en las entrañas de la Selección Estadounidense y sus miembros la contrastaron con la voltereta que les cedió el título de la competición. Sin embargo, en el último gol, se perdió algo de celebración con las agresiones del público hacia los jugadores al grado de que una lata de refresco llena impactó en la cara de Giovanni Reyna.
Reclamos y denuncias desde el campo se comenzaron a hacer, pero al momento se desconoció si se había realizado algo con el culpable. Éste sería arrestado más adelante, según el comunicado oficial del Empower Field. El reporte señaló que cinco personas en total fueron detenidas y una de ellas fue identificada como el agresor mencionado, el cual enfrentará cargos en su contra, además de ser vetado para siempre del lugar.
"Estamos totalmente comprometidos a proveer un espacio seguro, inclusivo y acogedor para todos los participantes y aficionados. Nuestro código de conducta para fans será estrictamente reforzado para asegurar una experiencia positiva para todos", añadieron en el comunicado después de señalar el éxito que tuvieron como sede para albergar eventos de la talla de la Nations League.
Gregg Berhalter también se expresó molesto por el ataque
A pesar de ganar y vivir la gran experiencia con este nuevo grupo de jóvenes, el entrenador Gregg Berhalter quedó más que molesto porque un partido de fútbol se viviera con el peligro que presenciaron: "Fue bochornoso, una falta de respeto, pero pudo haber sido peor. Este partido está en sintonía con la herencia de la rivalidad entre México y Estados Unidos. Esto forma parte del fútbol pero hay que saber comportarse dentro y fuera del campo con deportividad".