Goles de plástico necesarios
El abusica es aquel niño o niña del colegio que abusa de los más débiles. Pepito es un abusica, decían en mi cole.
Qué maravilloso es nuestro idioma que nos permite moldearlo como nos viene en gana.
Pues eso, el Barça es un abusica de los equipos con menor presupuesto. Mete goles y maquilla lo que hay detrás. A lo mejor es que detrás no hay nada, solo la nostalgia de aquel tiempo pasado, que fue mejor.
Hay peores clubes como el Milan o el United que ahora son marionetas comparado con quienes fueron en los ochenta y noventa.
Y así el Barça mete goles como panes a equipos que no les defienden delante como hizo el Madrid, ni que les achuchan en defensa como el Dortmund o el Inter en el partido de ida.
Estamos esperando que se produzca la desgracia. Todos lo esperamos, pero mientras llega el inevitable final, como en Rogue (la mejor peli de Star Wars después de la primera trilogía), brindamos con goles de plástico.
El Madrid no está igual de bien que el Barça, está igual de mal, que llega a ser lo mismo pero con toques de tristeza. Con toques de gris.
Llegan las fiestas, llega la paz antes de otra Roma, antes de otro Liverpool, antes de otro “pero venga Valverde haz algo”, antes de otro “ya os lo dije”, y mientras tanto, como os comento, comamos turrones con goles de plástico.