Messi, no te olvides de tus palabras en marzo
Las arengas gratuitas en otro verano del que nos olvidaremos muy pronto no sirven de nada si cuando te están metiendo tres en Anfield, tú no te pones a dar chillidos a doquier levantando al personal que te rodea.
En karate se suele decir: “que no me sorprenda tu primer suki (golpe), quiero que me sorprenda tu último suki”. Y allí está la clave.
Ahora empezará un festival de cuatros y cincos a ceros a equipos con un presupuesto veinte veces menor al que tiene el Barça.
Lo del Madrid va a ser otra escabechina porque no juegan a nada y si creen que con los mismos (un año más viejos) y Hazard que es el hermano gemelo de Coutinho, van a poder hacer algo en la Liga, que se olviden.
La clave es en marzo, esa es la clave, no valen lo mismo los minutos en los que te ahogas, en los que tienes 80.000 almas de rojo o de bianconero o de azul celeste animando sin tregua y tú perdiendo por dos o por tres, que los minutos contra, con todo mi amor, el Osasuna que ya es más que admirable que juegue en primera división con todos los problemas económicos que arrastra.
Es en ese momento, querido Messi, que te quiero ver con el micro como ayer y recordando que lo vas a ganar todo, que vas a hacer historia y que en las rampas fuertes, eres el primero que pedalea.
Los ciclistas de leyenda no se hunden en la primera curva del Mortirolo sino que tiran y llevan a su equipo a la historia.
No más pájaras Messi. Si perdéis, hacedlo con dignidad, que es lo que os dejásteis en Anfield.