Rafael Osuna, el primer tenista mexicano que ganó Wimbledon
En la antesala de la final de este Grand Slam, recordamos la ocasión en la que Rafael Osuna unió fuerzas con un jugador de USA para hacer historia
Solo tres mexicanos han ganado Wimbledon (todos en la categoría de dobles), pero el primero en hacerlo lo consiguió en 1960. Su nombre era Rafael Osuna, nació el 15 de septiembre de 1938 en la Ciudad de México y era conocido como el “Pelón”. Era un atleta completo que destacaba en tenis de mesa y en el básquetbol, sin embargo, poco a poco fue descubriendo su pasión por el tenis.
Osuna fue parte del representativo que asistió a la Copa Davis de Finlandia 1958 y desde entonces comenzó a escribir su nombre en esta disciplina. Dos años más tarde lograría entrar en la historia del tenis mexicano e internacional con una hazaña que perdurará por décadas y generaciones: ganar Wimbledon.
Fue en 1960 cuando Rafael Osuna acudió a este Grand Slam e hizo equipo con el estadounidense Dennis Ralston. Así, en la categoría de dobles masculinos, ambos tenistas fueron imponiéndose duelo tras duelo en el sagrado césped de Wimbledon hasta llegar a la final, donde enfrentaron a la pareja británica compuesta por Mike Davies y Bobby Wilson. El partido se terminó definiendo en tres sets a favor de Osuna y Ralston con parciales de 7-5. 6-3 y 10-8. Se escribía historia pura, Rafael se convertía en el primer mexicano que ganaba Wimbledon y entraba en los libros del tenis.
Los éxitos posteriores
Después de ello, el “Pelón” agigantó su legado en este deporte, ya que en 1963 volvió a ganar Wimbledon en la categoría de dobles, en esta ocasión junto al mexicano Antonio Palafox. De esta manera se convirtieron en la primera y única pareja mexicana de la historia en ganar este prestigiado Grand Slam.
En 1962 llevó a México a la final de la Copa Davis, mientras que dentro de su palmarés se encuentra también un título de US Open en singles y con ello se convirtió en el primer latinoamericano en conseguir este cetro. Su marca en singles quedó en 25-15, en dobles fue de 17-8 para dar un total de 42-23. El saldo total para Osuna fue de cuatro títulos de Grand Slam.
Por muchos es considerado la máxima gloria del tenis en México; murió en un accidente aéreo 1969 en Nuevo León a la edad de 31 años y entre muchas otras cosas es recordado también por su inclusión en 1979 al Salón de la Fama del Tenis Internacional, siendo de esta manera el único mexicano con esta distinción.