Marc Gasol: triple, robo y tapón para vencer a Embiid y los Sixers

Fueron tres acciones aisladas de Marc Gasol en el tramo final del último cuarto las que remataron a los Sixers en Memphis (105-10) en un partido áspero y poco atractivo, donde la intendencia tuvo más importancia que el arte y la belleza. La primera fue una puñalada desde el perímetro. A 4:16 del final, descerrajó un triple que dio la primera ventaja seria a los Grizzlies (98-95) en un duelo que tuvieron perdido en infinidad de ocasiones. Porque los de Philadelphia controlaron hasta los últimos cinco minutos. Con Embiid algo inactivo en ataque con solo 15 puntos (14 rebotes), para los 24 que promedia por noche, los de Brett Brown encontraron en el acierto de Timothe Luwawu-Cabarrot (20 con un 6 de 8 desde el perímetro) y Dario Saric (22 y 3/4) un recurso para llegar a dominar por 14 mediado el tercer periodo (59-73).

El robo

La segunda llegaría a un minuto de acabar. Con 100-98, y tras un falló en la penetración de Evans, los Sixers contraatacaron. El pase imposible de lado a lado de Simmons fue salvado in extremis por un Convington que dejó todo por hacer a Luwawu-Cabarrot. El alero no controló bien y la pelota acabó en manos de un Gasol que puso punto final a un nuevo intento visitante. Fue la décima pérdida en ese cuarto para los de Brett Brown. El total llegarían a las 24 con un duro castigo: 39 tantos de los Grizzlies serían por ese descontrol con el balón. 

El tapón

La tercera fue en su duelo directo contra El Proceso. Gasol estuvo casi todo el partido distante con Embiid. Alejado de la zona (como es ya habitual, vivió mucho en el parte alta del perímetro), el mediano de los Gasol no luchaba en el uno contra uno con Embiid. Sus bailes eran pocos y aislados. Aunque hubo instantes en el que se intercambiaron golpes. Pero fueron a cuentagotas. Uno de ellos, con solo 42 segundos por jugarse y +4 para los Grizzlies (102-98). El camerunés recibió en la parte derecha de su ataque, con la zona a pocos centímetros. Marc se emparejó con él. Embiid, trágico desde la personal (5/9), sobre todo en el momento clave del duelo, trató de lanzar cuando el internacional español levantó el brazo derecho. Su lanzamiento chocó con la barrera de Marc y el balón fue para unos Grizzlies que sobrevivieron con un excelso Myke Henry (firmado el 13 de enero y que logró sus primeros puntos en la NBA) desde el exterior, las acrobacias de Evans (18) y las punzadas de Chalmers, pero ante todo por Gasol. Una vez más.