Los 49ers jalan el gatillo y cortan a NaVorro Bowman
San Francisco y el estelar linebacker acordaron que lo mejor para ambos era transitar en direcciones distintas
NaVorro Bowman era la última pieza que se interponía entre los San Francisco 49ers y la modalidad de reconstrucción total. Ahora, el círculo está completo.
El equipo anunció el viernes que, de mutuo acuerdo, Bowman y los 49ers romperían su relación laboral. La frase “de mutuo acuerdo” como parte exclusiva de un comunicado en el que agradecen los ocho años de servicio, porque el linebacker no perderá un solo centavo de sus 6.7 millones de dólares.
Aunque al parecer es una separación amistosa, también es benéfica para ambas partes. Como parte del contrato garantizado de Bowman, existe una cláusula que detalla que en este tipo de circunstancias, los Niners recibirían crédito en el tope salarial por cada dólar que le pague su próximo equipo a Bowman. Por ejemplo, si firma por 1.3 millones, es la misma cantidad que San Francisco descuenta de sus libros.
Por otro lado, Bowman recibirá sus 6.7 millones de dólares sin ceder un solo centavo, conserva todo lo que le dé su siguiente equipo y podrá elegir su próximo destino, muy posiblemente un conjunto que le dé la oportunidad de conseguir su primer título. En algún lugar de los suburbios de Boston, Bill Belichick se relame los bigotes.
Para los aficionados de San Francisco, el cese del viernes pudiera ser doloroso después de que Bowman se convirtiera en el rostro de la franquicia y en la piedra angular de una defensiva que cargó al equipo hasta el Super Bowl, pero era necesario y no solo por cuestiones económicas.
Bowman, quien después de dos devastadoras lesiones _ de rodilla en 2014 y de tendón de Aquiles en 2016 _ ha perdido algo del nivel, también había perdido tiempo de juego a manos de Brock Coyle y la situación solo iba a empeorar ante la cada vez más próxima recuperación de Reuben Foster.
A pesar de no ser el mismo NaVorro Bowman que ha sido tres veces All-Pro, el veterano aún tiene mucho que aportar dentro y fuera del terreno, además de que el mercado para un linebacker medio está más abierto que nunca con la suspensión de Brian Cushing y la lesión de Luke Kuechly, por mencionar dos casos, además de que varios equipos contendientes tienen huecos en la posición.
Lo más probable es que Bowman no permanezca desempleado mucho tiempo, con la billetera gorda y los 49ers con más espacio en la nómina para seguir con su reconstrucción. Todos ganan.