Los Broncos se estrellan en la end zone de los Bills
A pesar de superar en casi cien yardas totales a los de Buffalo, el equipo de Denver sufrió la primera derrota de la temporada por quedarse con field goals.
El fútbol americano va de meter puntos, no de sumar yardas, no de tener grandes estadísticas. Una verdad que no hace falta recordar, ya lo sé, pero que se impone en tardes como la que se ha vivido en Buffalo hoy.
Porque resulta que los Denver Broncos, uno de los equipos más impresionantes del principio de temporada en la NFL, acudieron a jugar contra los Bills y si uno mira al número total de yardas se encuentra con que el equipo de Vance Joseph sumó 366 por tan sólo 272 de los de Sean McDermott.
Lo que pasa es que la excelente defensa de los Bills consiguió limitar a los Broncos a patear field goals en vez de permitirles anotar vía touchdown y eso, al final, fue su tumba en un sorprendente 26 a 16 final en el marcador.
Porque huelga decir que el ataque de Buffalo fue tan trabado y poco dinámico como de costumbre. Y que la defensa de Denver estuvo sobre ellos toda la tarde. En este sentido, hay que subrayar que uno de los drives definitivos, en el último cuarto, se alargó por una muy absurda falta de Von Miller que permitió continuar a los Bills con el balón tras quince yardas de actitud poco deportiva.
También ayudó al resultado final que la defensa de Buffalo consiguió tres sacks y dos intercepeciones, con un Trevor Siemian a menudo superado por los acontecimientos.
Es así como han perdido los Denver Broncos su primer partido del año: sumando muchas más yardas que su rival. Si sumas de tres en tres en vez de de siete en siete, no obstante, estas cosas pueden pasar.