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COPA CONFEDERACIONES

Alemania y Chile no entrenaron en el estadio de la final

Ninguno de los dos finalistas van a poder entrenar en el estadio de la final ya que el estado del césped del Krestovski no está en condiciones para la práctica del fútbol.

San Petersburgo
Marc-André ter Stegen entrenando con la selección alemana.
Alexander HassensteinBongarts/Getty Images

Las selecciones de Alemania y Chile no podrán entrenar este sábado en el estadio Krestovski, sede de la final de la Copa Confederaciones de Rusia, debido al mal estado del césped.

La campeona mundial deberá realizar su última sesión en el estadio Petrovski, antigua casa del Zenit de San Petersburgo, mientras que Chile lo hará en el Smena Stadium, donde suelen ejercitar las divisiones juveniles del principal club local.

El mal estado del campo de juego del escenario principal de la Copa Confederaciones fue blanco de críticas durante el torneo, entre ellas las de Cristiano Ronaldo.

Tras el encuentro del sábado pasado entre Nueva Zelanda y Portugal, el estadio fue cubierto con un techo retráctil para poder cuidar el césped, regular la temperatura e introducir luz artificial.

El moderno estadio ubicado en la Isla Krestovski fue inaugurado este año y será sede de varios partidos del Mundial de Rusia 2018. En la Copa Confederaciones acogió el partido inaugural y será el escenario también de la final, además de haber albergado otros encuentros de la fase de grupos.

Su talón de Aquiles es el césped, que tuvo que ser cambiado recientemente por completo. De hecho, el Zenit de San Petersburgo debió regresar a su antiguo estadio para permitir la recuperación contrarreloj del campo en las últimas semanas.

Por otro lado, el presidente ruso, Vladímir Putin, no presidirá la final de la Copa Confederaciones entre Chile y Alemania que se disputará el domingo en su ciudad natal, San Petersburgo.

Según informó hoy el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, Putin no acudirá a la final de un torneo que inauguró el pasado 17 de junio al presidir en el San Petersburgo Arena el partido inaugural entre Rusia y Nueva Zelanda.

No explicó los motivos, aunque se sobreentiende que se debe a su apretada agenda, que incluye la próxima semana su participación en la cumbre del G20 en Hamburgo, donde podría reunirse con el presidente de EEUU, Donald Trump.