El Estadio Jalisco tendrá una pantalla única en México
La modernidad se abre paso, poco a poco, en el Estadio Jalisco está a punto de instalarse una pantalla única en México, tecnología 360.
La modernidad se abre paso, poco a poco, en el Estadio Jalisco. En el último año, se han adecuado las zonas más urgentes. Primero los vestidores. El área perimetral. Las cámaras de vigilancia. Las bancas. Ahora, se cambian las butacas de la Zona y está a punto de instalarse una pantalla única en México.
Será una inversión grande. En total, 13 millones, 900 mil pesos para instalar la pantalla de 360 grados que será elevada en el centro del campo. Así, los aficionados podrán ver las acciones desde cualquier punto del estadio. Y será único en el futbol mexicano.
“La pantalla mide casi 10 metros de diámetro y tiene una altura de 3.22 metros. Estará suspendida con cables de acero. Son 3.7 toneladas suspendidas. Se está construyendo una nueva cabina en la parte alta del Jalisco, desde donde se manejará todo este nuevo sistema. Esto permitirá una experiencia distinta, ya dependerá de la creatividad de los equipos de comunicación tanto de Atlas como Leones Negros el uso que le puedan dar”, explica Alberto Castellano, presidente de Clubes Unidos de Jalisco.
“Se hará un cambio de sonido local, se instalará otra cabina. A partir del Apertura 2017, la Zona VIP estará remodelada: 768 butacas nuevas con un diseño altamente ergonómico y terminado inspirado en las bancas de los jugadores. Se sustituyó el piso que era de madera y el de esa zona aforo incremento 128 lugares”, añade el dirigente.
Aunque Chivas es accionista mayoritario en el Estadio Jalisco, no aportará nada. “Estos anuncios son posibles por el esfuerzo de UdeG y Atlas, encargados de pagar mensualmente el arrendamiento con el que se hizo posible concretar estos avances. La cifra de inversión en todo el remozamiento en el último año asciende a 30 millones, 464 mil pesos”, sentencia Castellanos.
Aunque se trata de un gran peso sostenido sobre el centro del campo, Alberto Castellanos asegura que no habrá problema. “El ingeniero del estadio cuida ese tipo de detalles. Claro que se hacen cálculos de la estructura, ahorita las bocinas pesan una tonelada, 200 kilogramos y se va incrementar a 3.7 toneladas. Es posible sin problema, la estructura del estadio la soporta eso sin inconveniente. Los cálculos los hacen los proveedores y Protección Civil vigilará”, detalla.
La nueva pantalla posiblemente no estará lista para el primer partido del Atlas como local, en la fecha dos del Torneo Apertura 2017. El proveedor calcula que podría estar funcional para el segundo o tercer encuentro de los Zorros. Después, Clubes Unidos de Jalisco se enfocará en otras mejoras, como los baños o la edificación de un Museo.
Un Estadio digno
Por otra parte, el presidente de Clubes Unidos de Jalisco, Alberto Castellano, ha dicho que la inversión realizada en el último año, devuelve al Coloso de la Calzada Independencia la dignidad. Es un estadio con mucha vida. Pero poco a poco, se moderniza.
“Lo que pensamos es en tratar de hacer algo diferente con la pantalla, algo que llamara la atención y diera una muestra de lo que es el Estadio Jalisco el día de hoy. Hay mucho por hacer, muchas asignaturas pendientes que se trabajarán para solventar, pero todo lo que hemos hecho le regresa dignidad al Jalisco y lo pone de nuevo como uno de los inmuebles más bonitos”, sentencia.
Con las adecuaciones, el dirigente confía en que algunas marcas importantes se acercarán en busca de anunciarse en el Jalisco. Así, se tendrán fondos suficientes para realizar otras mejoras que el inmueble necesita.
“Hemos tenido algunos patrocinadores más. Lo que se ha realizado ha atraído más gente que quiere estar en el Jalisco. Esto de la pantalla ayudará mucho a que más gente se incorpore y que vean que lo que muchos decían, que el Jalisco se estaba cayendo, no es tal. El Jalisco está más vivo que nunca. Es un inmueble donde puede realizarse cualquier evento. Se usa principalmente para el futbol pero puede ser atractivo para otro tipo de actividades”, concluye Castellanos.