DeShone Kizer cae como un regalo a los Cleveland Browns

Los Cleveland Browns ya tienen un quarterback de futuro, y sin la presión de ser un pick alto, ni siquiera su primer jugador. Así de fácil. DeShone Kizer no tiene nada que envidiarle al talento de Mahomes, Watson e incluso Trubisky. Los Browns puedne ponerle de titular, o dejarle en el banquillo, o elegir un quarterback el año que viene. Hagan lo que hagan estará bien.

Los Cleveland Browns con Sashi Brown a los mandos han realizado un draft impresionante. En primera ronda se llevaron al mejor jugador del draft, Myles Garrett, a uno de los mayores talentos físicos, Jabrill Peppers, y a un TE de la nueva era, fuerte y poderoso. Pero es que si todo esto no fuera suficiente, no han hipotecado el futuro en la búsqueda de una solución milagrosa a su necesidad de quarterback franquicia. Y sin embargo pueden haberla encontrado casi sin querer.

DeShone Kizer es un jugador muy, muy especial. Es capaz de dar cualquier tipo de pase a la perfección. La potencia que imprime a los balones hace que sea un arma muy poderosa en profundo. El problema es que eso exceso de confianza en su brazo le hace arriesgar demasiado, lo que le lleva a cometer error impropios. Ha caído en un equipo con Hue Jackson como head coach, un gurú de quarterback que seguro le enseñara a dominar sus instintos y ser un mejor QB.

Todo el potencial del mundo sin ninguna presión. No se puede pedir más

Cuando eres el cuarto pick de un equipo, a muy importante que sea tu posición en el campo, no debes sentir la obligación de liderar una franquicia de la NFL desde el minuto uno. Si todo sigue por el rumbo tomado, se avecinan buenos tiempos para los Cleveland Browns, sea con Kizer o sin él. Pero es que, cómo además les salga bien… podríamos estar hablando de un Draft antológico de esos que cambian el rumbo de una franquicia para años y años.