CAVALIERS 109-PACERS 108 (1-0)
Grande LeBron... pero los Pacers perdonan sobre la bocina
El equipo de Indiana tuvo balón para ganar, pero CJ Miles erró el lanzamiento. James se fue a los 32 puntos y 13 asistencias. Bien Paul George: 29 tantos.
10 segundos y los Pacers podían matar al campeón de la NBA en el primer partido de la eliminatoria de Playoffs en Ohio. 10 segundos y el balón llegaba a manos de Paul George que, presionado tanto por JR Smith como LeBron -que se olvidó de su marca para el dos contra uno- pasó a CJ Miles. Este se levantó, lanzó y falló. "En este tipo de situaciones tengo que hacer el último tiro", se lamentó amargamente George. "Nadie más que Paul podía hacerlo", reflexionó James tras conseguir el 1-0 para los Cavaliers en una apertura de postemporada que dejó dos cosas claras: Indiana no está de figurante y LeBron ha encendido el interruptor. Sin embargo, los Cavs no. Erráticos durante todo el encuentro, malgastaban rentas casi definitivas para que los Nate McMillan asustaran, y mucho, a un Quicken Loans Arena que ya vivió algo semejante el pasado año ante Detroit. En esa ocasión, los de Michigan fueron barridos (4-0) y los Pacers pueden vivir una realidad semejante, pero...
Todo es dudoso. El alambre en el que vivieron los de Ty Lue durante 48 minutos no fue casual. Este duelo fue un claro reflejo de su último tramo de temporada. Fueron débiles en defensa y se dejaron llevar de un modo exagerado. Indolencia lo pueden llamar. Tras la vuelta del All Star (balance 12-15 en contra) recibieron 109 puntos de media por encuentro con un 46,2% de acierto en contra. Este sábado fueron 108 con un 49,2%. Mal síntoma. Pero fuera como fuese, el Rey, en modo zero dark thirty, sigue sin perder en el debut de los Playoffs, acumula 12 victorias seguidas (empata con Shaquille O'Neal como la racha más larga) y suma su 18º triunfo consecutivo en primer ronda.
Y lo hizo de menos a más. Estuvo durante 10 minutos sin lanzar. Erró su primer tiro y durante casi dos cuartos no volvió a fallar: 8/8 en el lanzamiento con un 2/2 en el triple. Un facilidad anotadora que le llevó a los 32 puntos y 13 asistencias. Su voracidad se vio saciada en múltiples ocasiones por los cambios de pareja de baile (marca de la casa esas modificaciones), que en múltiples ocasiones le dejaron con Teague o Ellis. Muchos kilos de diferencia. Demasiada potencia de fuego para los dos. Aunque los Pacers no tenían excesivos problemas. Nunca se marcharon del encuentro (33-29 en el primer cuarto). Devolvían golpe a golpe con un excelso Paul George. El alero se fue a los 29 tantos. Su 6/8 en triples hacía soñar a los suyos con la épica de asaltar el pabellón de Ohio.
Con 66-59 y 44 puntos repartidos entre LeBron, Love e Irving, el tercer cuarto daba la bienvenida a la locura. Los Cavaliers no se escapaban y los Pacers no se subían al barco. Partido en tierra de nadie. Indiana se sujetaba con gancho a las barbas de un enemigo que veía la gran explosión de James en un lapso de dos minutos geniales (85-78 al 90-78) al acabar el periodo. Lance Stephenson cogió las riendas de los Pacers en el último cuarto. Sus ocho tantos casi de arranque daban a entender una cosa: vivir y morir con él es una opción que los Pacers van a aceptar. El 98-92 (7:57) se convertiría en un 103-105 (3:27) increíble tras un triple de Jeff Teague. El base lo descerrajó en otra jugada de descoordinación en las marcas de los Cavs. Era la primera vez que los de Indianápolis se ponían arriba desde el primer cuarto. James situaba el 109-105 y George el 109-108. Y después de un triple errado por LeBron se despertó la tensión, el falló de Miles y la algarabía en Cleveland. Es el primero. Son los Playoffs. Todavía queda mucha historia por delante.