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New England Patriots

Roger Goodell se tragará el sapo de ir a New England

El comisionado de la NFL no aparece por el estadio de los Patriots desde el partido del Deflategate. Ha confirmado que asistirá la partido inaugural de 2017.

Jan 22, 2017; Foxborough, MA, USA; Fans hold up a sign in reference to NFL commissioner Roger Goodell during the second quarter in the 2017 AFC Championship Game between the New England Patriots and the Pittsburgh Steelers at Gillette Stadium. Mandatory Credit: Winslow Townson-USA TODAY Sports
Winslow TownsonWinslow Townson-USA TODAY Sports

Uno de los morbos de la pasada temporada fue esperar a que los New England Patriots ganasen la Super Bowl LI para ver como reaccionaba Roger Goodell, comisionado de la NFL. La pelea, que poco menos que llevó al tema personal, en el asunto Deflategate le llevó a ser considerado el enemigo público número uno de Boston y, concretando, a ser una persona poco querida o respetada por Robert Kraft, Bill Belichik y Tom Brady, la santa trinidad de los Pats. Por eso, la entrega del Lombardi Trohpy y del premio al MVP tuvo meses de expectación. Y no defraudó. A pesar de los esfuerzo de Goodell por aparentar normalidad, se le notó enormemente que estaba forzando la situación y los tres protagonistas de la noche le trataron con enorme frialdad, rozando la descortesía.

Pues bien, ahí no acaba el calvario del comisionado. Entre sus obligaciones clásicas está al asistir al partido inaugural de la temporada. Y, también es tradición, ese partido se juega en casa del campeón reinante para que su afición pegue un abrazo colectivo a los suyos antes del nuevo año.

El problema es que Goodell no ha pisado el Gillette Stadium de New England desde la final de la AFC en el año 2014. Sí, el partido contra los Indianapolis Colts en el que se originó el Deflategate.

El comisionado ha evitado estar presente en un estadio donde, es evidente, ni es bien recibido ni va a ser tratado con cariño. En los playoffs de la temporada pasada, por ejemplo, eligió ir dos veces seguidas a Atlanta, en la ronda divisional y en las finales de conferencia, con la excusa de que eran los últimos partidos del estadio.

Ahora no le queda más remedio que asumir la gran tormenta de abucheos que se le viene encima. En la reunión de propietarios que hoy mismo concluye ha confirmado que estará presente en New England el 7 de septiembre, como no podía ser menos.

El comisionado de la NFL podría haber resuelto esta situación de manera mucho más digna. Si el año pasado, ya sustanciado el Defaltegate y sus sanciones, hubiese pasado por la casa de los Patriots se habría llevado la gran pitada, desde luego, pero pasaría más bajo el radar en medio de una jornada de temporada regular dominical corriente y moliente, y asunto concluido. no habríamos vuelto a hablar del tema. Pero lo fue dejando, lo fue posponiendo, incluso con el evidente regate de los playoffs, así que ahora afrontará el embarazoso momento con todas las cámaras para él y los creadores de memes esperándole con alegría y jolgorio.

Que así sea, y terminemos con esto de una vez. Sirva el artículo para decir que el calendario de la próxima temporada de la NFL se sabrá la semana del 17 al 21 de abril y que ahí conoceremos al rival de los Patriots en el partido inaugural, que saldrá de entre los Panthers, Texans, Falcons, Chargers y Chiefs.