Jesé es la amenaza canaria e Isco, la esperanza del Madrid
Las Palmas no ha sumado desde que llegó Jesé. Zidane reserva a Casemiro y abre hueco a Isco. Morata, con opciones.
Bien entrada la segunda vuelta, Las Palmas es el segundo equipo en posesión (por delante del Real Madrid y el tercero en pases acertados y faltas sufridas, datos que revelan un equipo con pretensiones y gustos refinados. En remates, en cambio, anda en medio del pelotón, indicador de que a la propuesta, con doce canteranos en la plantilla actual, le falta eficiencia. Especialmente en el último mes, en el que ha perdido los cuatro partidos que ha disputado y sólo ha marcado un gol.
La racha, que le ha llevado a su peor puesto del curso (12º, cuando llegó a estar segundo), coincide con la llegada de Jesé, lujazo que el presidente Ramírez regaló a la afición. Dice que le gustaría volver al Madrid, cuya hinchada le considera de la familia. Hoy, pese a que no ha marcado ni ha dado una asistencia con Las Palmas, se presiente como una amenaza. El regreso de Lemos será la gran novedad.
El Madrid le espera enredado en el larguísimo debate sobre la falta de correspondencia entre merecimientos y oportunidades. Zidane excluyó a Casemiro, al que ahorrará fatiga en casa porque fuera, donde llueve metralla, le ve imprescindible. Eso le abre el cielo a Isco, que puede presumir de no haber participado en ninguna de las tres derrotas del equipo. El público siempre ha estado de su parte y ahora contempla con temor su posible no renovación (las conversaciones andan en punto muerto), con un puñado de pretendientes nacionales y extranjeros a su alrededor. Cambió el partido en Vila-real y se le espera hoy para percutir contra ese muro de un once inamovible en los partidos importantes.
En las mismas está Morata, sólo siete veces titular en Liga, la mayoría por lesiones de Benzema, y que ha marcado en siete de sus ocho últimos partidos en la competición.