Las impactantes imágenes de la detención de Michael Floyd
La policía de Scottsdale ha publicado el vídeo del pasado 12 de diciembre del entonces jugador de los Arizona Cardinals por conducir borracho.
Una de las noticias más llamativas de los últimos tiempos en la NFL fue la detención por conducir bajo los efectos del alcohol del wide receiver de los Arizona Cardinals, Michael Floyd, que realizó la policía de Scottsdale y que puso el colofón a un año infame para alguien que aspiraba a realizar un 2016 destacado con su libertad de movimientos a la vuelta de esquina.
Casi se podría decir que lo que mal empieza, mal acaba.
El propio departamento de policía de la localidad de Arizona ha publicado el vídeo del pasado 12 de diciembre en el que se ve a un Michael Floyd totalmente dormido con el coche en marcha y que es incapaz de responder a las llamadas del agente durante un buen período de tiempo.
No hace falta decir que fue otro episodio más, sumado a su flojo rendimiento deportivo, que hizo que los Cardinals le cortaran poco tiempo después.
El vídeo no tiene ningún desperdicio.
También se ha dado a conocer que las pruebas a las que se le sometió dieron un valor de .217 en la tasa de alcoholemia, muy por encima del .08, que es el máximo permitido por la ley.
El mayor problema, aparte de los cargos de obstaculizar la vía pública y ser incapaz de obedecer a un oficial de policía, es que la legislación de Arizona es tremendamente impacable y con sanciones bastante duras cuando se supera la tasa de .20, que podría incluso mandarle a la cárcel un mínimo de 45 días.
En total, Floyd se enfrenta a seis cargos en una noche de las que no se olvidan.
En la actualidad, se encuentra integrado en la disciplina de los New England Patriots, que saltaron como gamos en cuanto estuvo libre y que se ha unido a la ‘nube’ de avispas que está exprimiendo hasta la última gota el Sr. Tom Brady.
Bill Belichick, técnico de los de Massachusetts, ha confirmado que conocían su situación por un momento que le puede costar bastante más que los millones de dólares que ya ha podido perder en la próxima agencia libre.