Esta vez no pudo ser. Loscampeones, con la misma mentalidad y la misma actitud con la que han saltado a la cancha en los siete partidos de esta temporada (se sienten superiores porque son superiores), cayeron por primera vez en lo que va de campaña (6-1) ante unos Atlanta Hawks serios, bien entrenados y muy acertados. Van a ganar muchísimo.
Los de Budenholzer cerraron filas con Dwight Howard a la cabeza (17 rebotes, tres tapones) y dejaron que los unos Cavaliers a los que conocen bien les intentaran batir desde el perímetro. Una idea que encantó a los locales, acostumbrados a brillar en esa faceta del juego, que se fueron hasta los 42 intentos desde la línea de tres puntos. ¿El problema? Esta noche no entraban los tiros...