Los Raiders se pasean ante unos Jaguars que no juegan a nada
Jacksonville fue durante toda la tarde incapaz de hacer nada a derechas ni en defensa ni en ataque, mientras los Raiders aprovecharon para entrenarse a su costa.
La situación de Jacksonville es insostenible y el equipo necesita soluciones drásticas. Simplemente no juegan a nada. Son una banda de solteros contra casados, un ejército sin generales… y también sin oficiales. Hasta hace poco parecía que Bortles jugaba a su bola, a lo que le parecía, a la espera de que alguien le diera un guión, pero últimamente ni eso. Partido tras partido, el quarterback maquilla sus números en los minutos de la basura, pero cuando de verdad importa es incapaz de completar un pase, de lanzar un balón a derechas o de tomar una decisión inteligente.
Y así empezó Bortles. Lanzando una semana más una intercepción en la end zone rival, mientras los Raiders, sin grandes artificios, anotaban un field goal en su segunda serie, otro en la tercera, un tochdown de carrera de Murray en la cuarta y otro touchdown, esta vez de pase de 2 yardas de Crabtree, en la quinta. La defensa de los Jaguars, igual de incompetente que su ataque, deambulaba por el campo sin que nadie supiera a ciencia cierta qué era lo que intentaban conseguir.
Los dos field goals de los locales no conseguían maquillar el 6-20 que campeaban en el intermedio al que Bortles se fue con cinco completos de catorce intentos para 57 yardas, una intercepción, y una desvergüenza sonrojante. Aunque para desvergüenza, la de Gus Bradley, que lleva demasiado tiempo haciendo menos que nada con una plantilla que tiene talento de sobra para, al menos, intentar jugar al football americano con un poco de coherencia.
La segunda mitad comenzó con un field goal de los Jaguars (9-20), quizá gracias a que su juego terrestre, sin ser nada del otro mundo, sí conseguía aprovecharse de que la defensa contra la carrera de Oakland tampoco está para tirar cohetes. Pero el resto del partido se convirtió en una pesadilla de desidia, con un equipo incapaz de hacer nada a derechas y otro tomándose el trámite casi como un entrenamiento, con Crabtree campando a sus anchas y Latavius Murray recuperando sensaciones perdidas. Los Raiders hincharon su marcador con dos field goals más y un touchdown del corredor, hasta llegar a sus 33 puntos, mientras que Bortles, como casi siempre, le daba un pase de touchdown a Julius Tomas cuando la grada ya estaba vacía y no le importaba a nadie.
Los Raiders pocas veces volverán a tenerlo tan sencillo este año. Los Jaguars no volverán a ser un equipo de verdad hasta que tengan entrenador. Así de fácil.