Empieza el football y los Chargers no levantan cabeza
Tras un turbulento verano en la franquicia californiana, San Diego comienza la temporada demostrando que si montan un circo, le crecen los enanos.
Debacle de los Chargers en Kansas City
A falta de 3 minutos para acabar el tercer cuarto, los Chargers ganaban 24-3 a los Chiefs. Durante esos instantes, y dando por acabado el partido, comencé a pensar en el título con el que titularía mi columna de esta semana. “Los Chargers ganan y pierden en Kansas City” era la conclusión que estaba sacando mientras veía el partido. Ganaban ya que llevaban una holgada ventaja en el marcador y perdían por la lesión de Keenan Allen. Finalmente, y de manera estrambótica, los Chargers dilapidaban 21 puntos en los últimos 20 minutos de juego para concederle a los Chiefs un partido que acabaría suponiendo la mayor remontada en la historia de la franquicia del Midwest.
Todo parecía un cuento de hadas para los Chargers la tarde del domingo. Comenzaron dominando a los Chiefs con un Rivers pletórico, un Gordon que anotó dos touchdowns en la primera parte (no anotó ninguno en su todo año rookie), un Keenan Allen que estaba dominando a placer al bueno de Marcus Peters y una línea defensiva que estaba ganando la batalla en las trincheras a la ofensiva de Kansas City. Las cosas empezarían a torcerse con un cambio de dirección de Keenan Allen que acabó en desenlace fatal (rotura de ligamentos que le dejará KO para toda la temporada). Posteriormente comenzaron a volver los fantasmas del pasado con el conservadurismo de McCoy y los problemas del personal de Pagano a la hora de placar y defender el centro del campo.
Los Chargers acabaron sin victoria, sin Keenan Allen y con una afición, de nuevo, contrariada. Por si fuera poco, los Raiders y los Broncos acabaron la jornada con victoria, por lo que San Diego es el único equipo de la división que cuenta con una derrota en el casillero. Kansas City se libró por los pelos del upset. En las casas de apuestas, la victoria de los Chiefs era la 2ª que menos dinero generaba (por detrás de la de Seattle), por lo que la victoria de San Diego hubiera echado a perder muchas apuestas. Los jefes se irán de visita a Houston en la 2ª jornada, en un partido con dos equipos que han empezado la temporada en la misma tesitura, ganando pero sin convencer lo más mínimo.
Los Raiders también remontan para llevarse un partido agónico en New Orleans
Los amantes de la épica, normalmente atribuida al juego defensivo de raza, seguramente sufrieron de una indigestión viendo el partido entre los Raiders y los Saints. Sin ir más lejos, el fichaje estrella en la offseason de Oakland, el cornerback Sean Smith, fue sentado en el tercer cuarto. Concedió un TD de 49 yardas en el segundo cuarto, fue quemado por Mike Thomas en el drive posterior y volvió a conceder un TD (de 98 yardas) en el tercer cuarto, lo que le costó un banquillazo. En 2008, los Raiders le dieron un gran contrato a DeAngelo Hall, que acabó siendo cortado antes de finalizar la temporada. Su sombra vuelve a recorrer el Coliseum.
En un partido marcado por el pobre juego de ambas secundarias, Oakland acabó culminando una espectacular remontada anotando tres touchdowns en el último cuarto. Cabe destacar la actuación de Derek Carr en los momentos decisivos del partido, donde sacó su mejor football de la tarde. Con 24-13 abajo en el marcador, lideró un drive rápido con un pase largo a Cooper en el lazo izquierdo y otro a Crabtree explotando la seam de los Saints. Posteriormente, Jalen Richard, en su primera carrera en la NFL, anotaría un TD de carrera de 75 yardas, respondido con otra anotación de los Saints que volvía a poner a los Raiders siete abajo. Y llegó la posesión final, en la cual Carr encontraría a Seth Roberts para anotar el último TD en un drive que superó los cinco minutos de duración. Del Rio, de manera valiente, confió el todo por el todo a Derek Carr y fue a por los dos puntos, que éste se encargó de materializar con un pase por alto a Crabtree, sellando así la victoria de los Raiders en New Orleans con un marcador final de 35-34.
Oakland recibe esta semana a unos Falcons que vienen de perder en casa ante Tampa y cuya defensa no da atisbo ni señales de que pueda poder permitirse el lujo de poder parar al ataque Raider. A priori, son los grandes favoritos para ganar el partido y ponerse así 2-0. No parece algo especialmente significativo de señalar, pero estamos ante una franquicia que, en los últimos 20 años, tan solo ha conseguido iniciar la temporada con un 2-0 de inicio en dos ocasiones, en los años 2000 y 2002 en concreto. Por lo tanto, están a una victoria de iniciar la temporada con un récord de 2-0 por primera vez en 16 años, se dice pronto. Es especialmente importante ya que además, los Raiders jugarán como visitantes en las jornadas 3 y 4.
MVPs de la jornada en la AFC West
Alex Smith: Al igual que el equipo, fue de menos a más y convirtió una actuación que pintaba a gris en una de las mejores de su carrera. Anotó el TD de la victoria en una option y tuvo un alto porcentaje de acierto en pases de más de 10 yardas, con 9 de 14 para 176 yardas y un touchdown.
Derek Carr: Cuando su equipo más lo necesitaba, sacó el mejor football para llevar la victoria a Oakland. Su último cuarto fue espectacular y fue el principal estandarte en el que se sostuvo la remontada final. Tanta es la confianza que tiene Del Rio en él que prefirió jugarse el partido en una conversión de dos puntos antes que ir a asegurar con el extrapoint que hubiera mandado el partido a la prórroga.
Spencer Ware: El MVP de la semana por encima del resto de jugadores. En escasos 34 snaps fue capaz de conseguir 70 yardas en 11 carreras y 129 yardas en 7 recepciones, sumando un total de 199 yardas. En el mismo número de snaps, Charcandrick West consiguió un total de 23 yardas.