La total falta de estabilidad de los Eagles con los QBs
Los fallos en la programación y planificación en el puesto de quarterback de Philadelphia tiene a su afición en vilo.
En el fútbol americano es importantísima la programación. De hecho, una programación que dé estabilidad a un equipo en la posición de quarterback suele ser sinónimo de éxito: New England, Seattle, Pittsburgh, Carolina, New Orleans, Arizona ahora con Carson Palmer…. Mientras lo contrario se torna, en un 90% de los casos, en fracaso. Tomemos el ejemplo de Green Bay en la era Favre. Los Packers mantuvieron una continuidad, pero siempre contaron con un segundo a punto, desde la época de Mark Brunnell hasta que acabaron dando la oportunidad a Aaron Rodgers.
Philadelphia es justo el ejemplo contrario. Hace un año y unos días, Chip Kelly podía presumir de tener cuatro quarterbacks capaces de competir por la titularidad. Dos de ellos, Tim Tebow y Mark Sanchez habían llevado a anteriores equipos a los playoffs. Otro, Sam Bradford, fue la primera elección de todo su draft. El cuarto, Matt Barkley, se consolidó como un seguro pasador universitario con USC. Barkley fue traspasdo a Arizona y ahora está en el practice roster de Chicago. Tebow, cortado, prueba suerte en el béisbol. Bradford y Sanchez mostraron que no eran la respuesta al complicado sistema de ataque de Kelly. Total, de los cuatro, no queda ninguno –de hecho ni el entrenador-. Ahora, el posible éxito de Philadelphia descansa en las espaldas del rookie Carson Wentz y del trotamundos Chase Daniel. Entre ambos, un pase de touchdown en la NFL…
El pronóstico a futuro de unos Eagles que también dejaron ir a Tennessee al running back que trajeron como estrella, DeMarco Murray, es al menos reservado en una temporada que se espera en Philadelphia más como transición que como cualquier otra cosa. La ciudad, por cierto, con Phillies y 76ers en la parte más baja de sus respectivos deportes, esperaría más de estos Eagles que probablemente evoquen a los de aquella película Invincible sobre la vida del wide receiver Vince Papale. La afición de Philadelphia espera que Doug Pederson sea el nuevo Dick Vermeil, head coach de aquel equipo de Papale.
Ya veremos…
Cinco cosas que pienso:
1. Pienso que es muy emocionante que queden 50 horas escasas para que comience una nueva temporada de la NFL.
2. Pienso que la palabra más escuchada esta semana en el vestuario de Carolina es “venganza”. ¡Menudo bautizo de fuego le espera a Trevor Siemian!
3. Pienso que tantas mariposas tendrá en el estómago Jimmy Garoppolo como Siemian.
4. Pienso que la visita de los Raiders a New Orleans será clave en el devenir de la temporada. Para Oakland, comenzar esta campaña con el pie derecho es una obligación.
5. Pienso que es espectacular que vuelva a disputarse un partido de la NFL en México. ¡Vaya memorias me evoca este hecho! Tantas, que alguna columna antes del gran duelo entre Texans y Raiders se la tengo que dedicar al fútbol americano en el país que me vio nacer.