Cierran la piscina de salto de agua verde debido al mal olor
El saltador Stephan Feck explicó que "toda la sede huele como si alguien se hubiera echado gases". Peligran las finales de esta tarde.
Continúa la polémica de la piscina olímpica. La piscina de saltos, que desde el pasado martes el agua es de color verde por unos problemas en el pH y en los filtros, empieza a dar problemas serios. Esta misma mañana, los saltadores no se han podido entrenar y está en el aire la competición de esta tarde de saltos de trampolín femeninos, debido al mal olor. El alemán Stephan Feck compartía en Facebook una imagen tapándose la nariz y diciendo: “El momento en que quieres entrenarte un poco y la piscina está cerrada. Toda la sede huele como si alguien se hubiera echado gases”.
La piscina de waterpolo, en cambio, ya cuenta con una tonalidad del agua de color azul, normal, por lo que no hay peligro para el encuentro de esta noche de la Selección masculina de waterpolo ante Francia (01:50). En la piscina de saltos se debe disputar la sincronizada la próxima semana, y aún quedan algunas eliminatorias y finales de saltos. La organización dijo que no había problemas para la salud y los saltadores estaban contentos con el color del agua porque veían más, aunque algunos jugadores de waterpolo, cuando compitieron en el agua verde, si se quejaron de que les picaban los ojos.