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ESTADOS UNIDOS

Fiscal general de Estados Unidos presenta cargos contra cuatro policías por la muerte de Breonna Taylor

El fiscal general de Estados Unidos presenta cargos en contra de cuatro policías por la muerte de Breonna Taylor, quien fue asesinada en marzo de 2020.

Estados Unidos
El fiscal general de Estados Unidos presenta cargos en contra de cuatro policías por la muerte de Breonna Taylor, quien fue asesinada en marzo de 2020.
Leigh VogelGetty

La Fiscalía General de Estados Unidos presenta cargos federales en contra de cuatro policías que estuvieron implicados en el asesinato de Breonna Taylor, una joven afroamericana de 26 años que murió a manos de la policía de Louisville, Kentucky.

De acuerdo a lo informado en una rueda de prensa por el fiscal Merrick Garland, los oficiales Kyle Meany, Joshua Jaynes y Kelly Goodlett fueron acusados de exceso de fuerza y de utilizar información falsa para obtener una orden de restricción, mientras que el cuarto oficial de policía, Brett Hankinson, cuenta con cargos por violación de los derechos civiles y presunto uso excesivo de la fuerza.

“Los acusados sabían que la orden judicial contenía información falsa y engañosa”, explicó Garland, añadiendo que los oficiales que no fueron partícipes en la redada tomaron medidas para encubrir su fechoría”, como mentirle al FBI.

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Caso Breonna Taylor

Breonna Taylor se convirtió en una de las reivindicaciones del movimiento Black Lives Matter, pues la enfermera afroamericana de 26 años fue asesinada en su departamento tras una redada de narcotráfico fallida.

De acuerdo a los hechos, los oficiales de policía ingresaron al hogar de Breonna vestidos de civiles y sin avisar, ya que contaban con una orden “No-knock (entrar sin avisar) para ingresar al lugar, misma que fue emitida como parte de una investigación por narcotráfico.

Al momento de los hechos, Breonna se encontraba durmiendo en compañía de su novio, quien, al darse cuenta de la irrupción en su hogar, sacó un arma con licencia para defenderse pensando que eran ladrones. Al ver esto, las autoridades dispararon más de 20 veces, terminando con la vida de Taylor.

A seis meses del suceso, el 23 de septiembre de 2020, sólo uno de los policías involucrados fue imputado por tres cargos de violencia, mientras que el resto no habían sido acusados, hasta ahora.