Magic Johnson, la cara del combate al VIH en el deporte de Estados Unidos

Previo a la campaña 1991 de la NBA, tras perder las finales ante Michael Jordan, Magic Johnson se sometió a un examen médico que reveló que el elemento de los Lakers era portador del virus de inmunodeficiencia humana (VIH).

En los inicios de la década de los noventa el SIDA, enfermedad asociada al VIH, aún se consideraba una afección propia de la comunidad LGBTTTIQA y Johnson tuvo que luchar contra los prejuicios y alzó la voz para concientizar sobre los riesgos a los que estaba expuesta la gente heterosexual.

Johnson, quien se retiró de la NBA más tarde ese año y se incorporó a la liga dos años más tarde, reveló que contrajo el virus al tener relaciones sexuales sin protección con múltiples parejas durante su carrera como profesional.

Lo que había representado un error que mandaría a la ignominia una de las carreras más brillantes de la NBA, representó una oportunidad para que Johnson se volviera la figura deportiva más prominente en la batalla contra el VIH.

Vida dedicada a la pelea contra el SIDA

En noviembre de 1991, el mismo mes de su retiro profesional, el exbasquetbolistas creó la Magic Johnson Foundation para combatir al VIH (posteriormente la organización se diversificó).

Un año después se integró un comité gubernamental para combatir al agente, aunque posteriormente lo abandonó por diferencias con la administración de George H. W. Bush. Asimismo, fue mensajero de la paz de Naciones Unidas y lidera una campaña para evitar la propagación del SIDA en la comunidad afroamericana.

De acuerdo con información de CNN, Johnson ha recaudado más de 20 millones de dólares para combiar al VIH y ha destinado más de cuatro MDD en becas.