Pablo Punyed no espera ser el salvador de La Selecta
El reciente campeón de Islandia regresa a la Selección Salvadoreña para cambiarle la cara al equipo, pero desea realizarlo desde un punto colectivo.
Hugo Pérez quiere que lo sucedido en la primera fase del Octagonal Final quede atrás. Es cierto que sólo se perdió un enfrentamiento ante Canadá, pero en caso no se pudo tomar ni una victoria y ello provoca que lleguen condicionados para esta segunda triple fecha. Sin embargo, par de modificaciones buscan ser lo que le hacía falta al equipo para impulsarlo y se espera que una de las más destacadas sea la incorporación de Pablo Punyed al centro del campo.
El volante, que tenía ciertos años sin aparecer en una convocatoria, recibió ahora la oportunidad de parte de Pérez después de observar su consagración en Islandia con el Víkingur, además de ser su tercer campeonato de liga obtenido en dicha nación. Un aporte distintos de seguridad, toque y talento es lo que puede aportar este hombre y más cuando la sensación de estar de vuelta es única.
"Sentí cosas como si fuera la primera vez que me convocan”, comentó el mediocampista en entrevista para Güiri al Aire previo a su viaje que le permitirá volver a ver El Salvador este domingo por la noche, antes de comenzar entrenamientos el lunes 4 de octubre. “No he hablado con el cuerpo técnico pero tengo las mismas ganas de querer sacar adelante a la selección con lo nuestro”.
Además, existe confianza y compromiso en él para comprobar que puede y debe estar en el equipo, incluso, ha dado el mensaje que todo aficionado quisiera oír antes de ir a la guerra; darlo todo sin excusa: “Yo estoy para jugar tres partidos sin problema, es lo normal en esta liga y eso es necesario en la fecha FIFA. Hay que adaptarse a diferentes circunstancias”.
"No llego como solución pero sí como una pieza más para ayudar al equipo", concluyó.
Punyed y Hugo Pérez conocen bien a los próximos rivales
El Salvador arranque esta nueva parte del reto recibiendo a Panamá y con la obligación de ganar. Después visitará a Costa Rica y, finalmente, serán anfitriones de México en el Cuscatlán. Tanto Punyed como el resto de los jugadores y cuerpo técnico saben a lo que se enfrentan: “Son rivales complicados. Nosotros tenemos que jugar a lo nuestro porque El Salvador ha mejorado mucho en saber explotar sus virtudes”.