Ronnie Lott, el safety que con un golpe te marcaba de por vida
El feroz back defensivo ayudó a los 49ers a ganar cuatro Super Bowls en la década de los 80; terminó su carrera con 63 intercepciones.
Si fuiste un receptor en la NFL entre 1981 y 1994 seguramente alguna vez sentiste su presencia en el campo. Cuando Ronnie Lott golpeaba a un rival, le lastimaba el cuerpo, el orgullo y hasta el alma.
“Realmente nunca le tuve miedo a los backs defensivos, por mi tamaño. Podías correr sobre ellos”, dijo alguna vez el corredor Eric Dickerson, miembro del Salón de la Fama. “Pero Ronnie pegaba como linebacker, y venía 25 yardas a toda velocidad. Lo veías venir y entonces… ¡bam! Ya estabas en los highlights de los 49ers”.
Ronald Mandel Lott (8 de mayo, 1959, Albuquerque, New Mexico) fue reclutado por los San Francisco 49ers en la primera ronda (octava selección global) del Draft 1981, proveniente de USC. Jugó como cornerback en sus cuatro primeros años en la NFL y en los cuatro recibió invitación al Pro Bowl.
En 1981, su año de novato, fue nombrado primer equipo All-Pro, tras sumar siete intercepciones y regresar tres al touchdown.
Lott fue una pieza clave en la defensiva de los 49ers, que ganaron el Super Bowl XVI.
En 1985 debutó como free safety. Al final de esa campaña, en un partido ante los Dallas Cowboys, el casco del fullback Timmy Newsome golpeó la mano de Lott. Los doctores le recomendaron someterse a cirugía, pero Ronnie prefirió que le amputaran la punta del dedo meñique para poder jugar los Playoffs.
“No le importa su cuerpo”, comentó Randy Cross, ex compañero de equipo de Lott en los 49ers. “¿Por qué le importaría el tuyo?”.
Cuando niño, su ídolo fue Dick Butkus, el feroz linebacker de los Chicago Bears. Y eventualmente Lott se unió al club de Butkus de los defensivos más temidos de la historia de la NFL.
“Es como un linebacker central alineado como safety”, dijo el ex coach de los Dallas Cowboys, Tom Landry. “Es devastador. Domina la defensiva secundaria mejor que cualquiera que haya visto.
Sí, cualquier quarterback que jugara ante los 49ers sabía que en cada pase, Lott estaría cerca del balón. Cualquier receptor sabía que atraparlo tenía un precio. Un precio doloroso.
Con ese estilo agresivo, Lott ayudó a los 49ers a ganar cuatro Super Bowls en la década de los 80. También jugó para Los Angeles Raiders (1991-92) y los New York Jets (1993-94).
“Quería lastimarte, quería lastimar a tu familia... quería que toda familia estuviera molesta y preocupada”, dijo, en tono broma, Marcus Allen, ex compañero de habitación de Lott en Southern California.
Sin embargo, fuera del campo, Lott siempre fue considerado una persona muy gentil.
Culminó su ilustre carrera con 10 Pro Bowls y 63 intercepciones, incluidas nueve en Playoffs, con las que comparte el récord de todos los tiempos con Ed Reed, Bill Simpson y Charlie Waters.
Fue entronizado en el Salón de la Fama en el 2000 y seleccionado como miembro del equipo del 75 aniversario de la NFL.